Un nuevo cruce de palabras a través de redes sociales, protagonizaron el expresidente Álvaro Uribe y el presidente Gustavo Petro.
A través de redes sociales, ambos líderes se lanzaron duras acusaciones, que inició con la discusión de la reforma laboral y el recargo nocturno.
“Hoy una pizzería que opera hasta la medianoche paga un recargo nocturno a partir de las 9:00 p. m.; si se aprueba la reforma, ese recargo comenzará a las 7:00 p. m., lo que es insostenible para muchos emprendedores”, expresó Uribe.
La controversia inició cuando el presidente Gustavo Petro insinuó que Uribe fue responsable de la muerte de trabajadores durante el tiempo en que administraba la Hacienda San Cipriano, ubicada en el noreste antioqueño. Esta declaración provocó una respuesta inmediata y vehemente de Uribe, quien defendió su historia empresarial y familiar.
“No se porqué Uribe ataca a las y los trabajadores de Colombia. En su vida de hacendado tuvo un problema laboral con los trabajadores de una de sus haciendas y todo terminó en la muerte de muchos”, dijo Peto.
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La respuesta de Álvaro Uribe
El exmandatario respondió recordando su historia con la Hacienda San Cipriano, asegurando que mientras Petro participaba en actividades guerrilleras como miembro del M-19, él se dedicaba a trabajar y a gestionar la propiedad familiar. Uribe explicó que la finca fue entregada a los trabajadores debido a la presión de las FARC sobre el sindicato, y que, tras su abandono, la guerrilla destruyó poco a poco el lugar.
«Respete, Presidente Petro, que mientras usted delinquía, yo trabajaba«, escribió Uribe. Luego, detalló cómo funcionaba la hacienda en ese entonces, mencionando las 18 casas para trabajadores, las 40 mulas paneleras y la infraestructura de producción de panela. Según Uribe, la entrega de la propiedad se hizo de forma legal en 1979, y el saldo de la transacción nunca fue cobrado, regalándoles la finca a los trabajadores.
Uribe también negó las acusaciones que señalaban que había asesinado a sindicalistas para recuperar la finca y acusó a Petro de reproducir una «falsedad» promovida por la guerrilla. Así mismo, mencionó que más tarde, un vaquero que quedó a cargo de parte de la ganadería fue asesinado por paramilitares, obligando a su familia a abandonar la zona.
La réplica de Gustavo Petro
La respuesta del presidente Petro no se hizo esperar, replicando el mensaje de Uribe con una crítica a su estilo de vida como hacendado y defendiendo su pasado como guerrillero. Petro afirmó que, mientras los trabajadores de Uribe pasaban hambre, él intentaba llevar a cabo una revolución para mejorar las condiciones de vida de los más vulnerables.
«Hacer revoluciones no es delinquir, pero matar revolucionarios por la espalda, a sangre fría y por simple odio, sí«, subrayó Petro en su mensaje.
En su respuesta, Petro también invitó a Uribe a unirse a lo que llamó una «revolución de equidad social y democracia profunda«, sugiriendo que los tiempos del hacendado que veía a sus trabajadores como «esclavos negros» estaban llegando a su fin y que el camino del cambio pasaba por una transformación social que promoviera la igualdad.
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