Las huellas de Villamil
En una reciente visita al “Museo Jorge Villamil” de Neiva, que dirige María Ruth Arboleda Muñoz, conseguí el libro escrito por mi paisano y colega garzoneño, Vicente Silva Vargas, titulado “Las Huellas de Villamil”, que va por la tercera edición. Son 524 páginas que, como dice Andrés Salcedo, “están escritas con toda la carga emocional de que es capaz quien escribe sobre un personaje apabullante de su propia tierra. Un mito de la cultura colombiana. El máximo orgullo de los opitas”. Hace unos años Salvador Gómez, presidente del Consejo de Administración de Coomotor, me contó que estaba leyendo la página 219 del texto de Vicente Silva sobre Villamil y se había enterado que esta periodista había tenido el privilegio de estar presente cuando el artista recibió el premio de la Asociación de Cronistas del Espectáculo – ACE, de Nueva York, que le mereció el título de “Compositor de las Américas y el Mundo Hispano”. No encontré el libro en ese momento, solo ahora en plena pandemia lo pude adquirir y estoy disfrutándolo. El viaje a la “capital del mundo” realizado gracias a Dios y a la revista Cromos que dirigía mi paisano Augusto Calderón Díaz, me permitió cubrir el evento en el Grand Ballroom del Hotel New York Hilton, sitio de las grandes celebraciones faranduleras de los Estados Unidos. En la descomunal tarima y una escenografía digna de Hollywood, se produjo uno de los momentos más gloriosos en la vida artística de Villamil, al ser reconocido su talento por la prestigiosa ACE. De Colombia estaban Rodrigo Trujillo Villamil, el periodista Fernán Martínez Mahecha, quien posteriormente fuera asesor y empresario de Julio Iglesias, Enrique Iglesias, Chabeli Iglesias, Juanes, e incluso del futbolista James Rodríguez, además productor del Show de Cristina en Univisión. En el salón vimos también a Celia Cruz, Mario Moreno “Cantinflas”, Julio Iglesias, Geraldine Chaplin (hija de Charles Chaplin) y su esposo el cineasta y escritor Carlos Saura. La ceremonia fue conducida por el más popular presentador de televisión de habla hispana, el mejicano Raúl Velasco, realizador del programa “Siempre en Domingo” que se pasaba en muchos países de habla hispana y en los Estados Unidos. Definitivamente recordar es vivir.
