El gobierno nacional debe reorientar su accionar para mejorar las relaciones diplomáticas con los demás países del mundo. No se puede seguir generando ambientes revanchistas con las Naciones que toman decisiones unilaterales para exigir el visado de los colombianos que pretenden ingresar a sus países. Nos había costado una década para buscar que el Reino Unido, tomara la determinación de eliminar la exigencia de la visa para entrar a su país, producto de la gestión diplomática que realizaron los expresidentes Juan Manuel Santos Calderón e Iván Duque Márquez, que lograron que, a finales del mes de diciembre de 2022, el Estado Británico aprobaba la entrada de colombianos con solo presentar el pasaporte. Desafortunadamente la indisciplina de las personas que lograron entrar, mediante la presentación de documentos falsos para buscar asilo, cuyo número pasó de 6 a 2000 aspirantes para buscar la residencia en solo dos años, obligó a las autoridades británicas a volver a exigir el visado para su ingreso.
La diplomacia del gobierno del presidente Gustavo Petro Urrego se ha visto sacudida esta semana luego con esta decisión tomada, para lo cual Colombia advirtió que, si no se echa para atrás dicha determinación, aplicará el principio de reciprocidad y también pedirá visa a turistas de esa nacionalidad que lleguen al país. Tal decisión es absurda. En el campo de las relaciones diplomáticas, lo primero que se debe es establecer los mecanismos para estructurar estrategias de manera bilateral, con el fin de subsanar las dificultades que se estén presentando en dichas relaciones. A la ligera no se pueden tomar esta clase de decisiones. El Reino Unido, es una potencia económica mundial. Nosotros necesitamos más de ellos, que ellos de nosotros. Igualmente, ninguna persona de este país, europeo, esté interesado en venir a visitar los atractivos turísticos de las zonas dominadas por las organizaciones narcoterroristas.
El gobierno británico informó que, a partir del 26 de noviembre de 2024, los colombianos que deseen viajar al Reino Unido deberán obtener una visa, una exigencia que había sido eliminada en noviembre de 2022. El desespero de las familias colombianas por salir del país desde que se posesionó el actual primer mandatario de los colombianos es mayúsculo. Ante la falta de oportunidades laborales y en un país sumido en el 30% con dominio de la criminalidad, no se vislumbra un futuro que les garantice mejorar su bienestar general. Es la triste realidad que viven los connacionales, que migran hacia otros países, que buscan un cambio verdadero, para mejorar los niveles de calidad de vida. Todos coinciden, que, con el actual estilo de gobierno, no existe futuro para este país. Así lo demuestran los indicadores económicos que publica el Dane y los gremios económicos. Aunque los áulicos de la administración nacional digan lo contrario, la crisis social, económica y política es otra.