Tres de los sindicatos más grandes de Estados Unidos pidieron a la administración de Joe Biden denunciar la violencia que, dicen, está utilizando el Estado colombiano para reprimir a los manifestantes que participan en el paro nacional.
En una carta dirigida al Secretario de Estado, Antony Blinken, el AFL-CIO, IBT y SEIU le dicen al funcionario que utilice «todos los mecanismos de políticas existentes disponibles para abordar esta crisis y lograr que Colombia cumpla con sus obligaciones internacionales laborales y de derechos humanos», y que apoye negociaciones para alcanzar compromisos claros y vinculantes.
«Durante muchos años, la policía nacional y el ESMAD han utilizado una fuerza excesiva, incluso mortal, para hacer frente a las protestas pacíficas por justicia social y contra las políticas que afectan negativamente a la mayoría de los trabajadores en Colombia. La crisis actual ha vuelto a poner de relieve prácticas que Colombia ha utilizado durante mucho tiempo en respuesta a las protestas legales y pacíficas de los trabajadores, así como de activistas afrodescendientes e indígenas», dicen en la carta.
Los líderes sindicales le sugieren a Blinken, por ejemplo, que utilice la adhesión de Colombia a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) para exigir que el país cumpla con los altos estándares de esta organización en materia de libertades de asociación, expresión y reunión.
Así mismo, le piden que solicite al gobierno de Colombia acepte la visita de verificación que ha solicitado la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).