La misma iniciativa fue hundida en abril, durante la legislatura pasada, en la plenaria de la Cámara de Representantes. Detrás del proyecto se encuentra el representante liberal Juan Fernando Reyes.
Al Congreso llegará una vez más una discusión que ha sido tan esquiva como controversial: la reglamentación de la eutanasia, un pendiente que suma más de 23 años, luego de que la Corte Constitucional la despenalizó en el ordenamiento colombiano.
Nuevamente el autor de la iniciativa es el representante Juan Fernando Reyes, durante los últimos periodos ha insistido sin éxito en su aprobación. De hecho, apenas en abril pasado la plenaria de la Cámara de Representantes hundió el Proyecto para regular la eutanasia en el país
Su articulado tiene como base principal reglamentar la eutanasia para “toda persona que sufra una enfermedad terminal o enfermedad incurable avanzada, sin restricción alguna por motivos de pertenencia étnica, sexo, identidad de género, orientación sexual, religiosa o de cualquier índole”.
Los únicos requisitos son que el solicitante sea mayor de edad, dar cuenta del sufrimiento intolerable, tener la competencia mental para hacer la solicitud, un consentimiento libre, inequívoco, informado y reiterado, y que el procedimiento sea hecho por un profesional de la medicina.
Hace algunas semanas se conoció una resolución del Ministerio de Salud que fija las condiciones para que pacientes puedan acceder a la eutanasia, la cual no tardó en levantar ampolla en el Congreso. Si bien algunos la calificaron como un avance con miras a una muerte digna, hubo otros que no bajaron la resolución de “regresiva” y hasta anunciaron acciones legales contra el documento.
A pesar de que varios han señalado que el proyecto no es necesario porque ya hay pronunciamiento de la Corte y resoluciones del Ministerio de Salud, el congresista defendió la iniciativa recientemente, dado que “todavía hay inseguridad jurídica para las personas que deciden acceder a este procedimiento y para los médicos que lo practican.
*Información del medio El Espectador.