Los hermanos Gilberto y Miguel Rodríguez Orejuela criticaron las declaraciones entregadas por el expresidente Andrés Pastrana en la Comisión de la Verdad sobre la financiación ilegal de la campaña de Samper.
En una misiva, enviada públicamente por correo electrónico a varios medios de comunicación, los exjefes del Cartel de Cali acusan a Pastrana de “posar de víctima de la corrupción sin incluirse en dicha corrupción” haciendo alusión a un episodio del año 2000, cuando según Gilberto y Miguel Rodríguez Orejuela recibieron en La Picota la visita del doctor Santiago Rojas, médico de Presidencia, quien los “chantajeó” a nombre de Pastrana para escribir una carta que contara cómo supuestamente fue el apoyo de estos narcotraficantes en la campaña de Samper involucrando también a Serpa.
“El presidente dice, que tanto usted como su hermano están en una conspiración en compañía con Samper y Serpa para desacreditarlo ante la opinión pública por la corrupción que hubo en los contratos de Dragacol y Chambacú, y en represalia por haber sido él, el que denunció el proceso 8.000, y eso él no se lo perdona a ustedes, que no duden por un segundo, que él antes de irse de la Presidencia los pondrá en Estados Unidos. El presidente dice que la única solución que él ve posible es que ustedes escriban esa carta”, dice el documento.
La misiva según se explica, sería utilizada de forma privada para persuadir a Samper de hacer declaraciones sobre Chambacú y Dragacol, sin embargo, esta habría sido revelada por el expresidente Pastrana hace dos semanas ante la Comisión de la Verdad.
“Usted entregó una carta, que prometió no entregar, claro que no contábamos que para la ética que usted maneja la palabra no es un compromiso sino un instrumento para conseguir sus fines, ante una Comisión seria y respetable producto de un vulgar chantaje, para acusar a otro menos corrupto que usted, sin decir toda la verdad”, insisten.
Finalmente, le recuerdan al expresidente Pastrana su supuesta «participación criminal en los contratos de Dragacol y Chambacú», asegurando que fue el «jefe de esa conspiración delincuencial para defraudar al Estado» y que su campaña también fue financiada con su dinero, a través de la familia Pava Camelo.