Lucía Ayala, directora de dispositivos médicos y otras tecnologías del Invima, enfatizó sobre los proyectos de ventiladores colombianos, pues no se han aceptado todavía, aunque podrían usarse en caso de emergencia.
«Invertarse un ventilador es un proceso complejo. Todos hemos trabajado a velocidades aceleradas y no hay demoras en estudios, sino todo lo contrario. A la semana la comisión ya revisa la información que se envía. La investigación clínica no se puede eximir. Todavía ninguno de los proyectos colombianos ha demostrado eficacia, porque los proyectos con personas son lentos aún», contó.
Por otro lado, Ayala respondió sobre los ventiladores importados que tiene el Ministerio de Salud y que hay en Cundinamarca, pero no han podido ser usados.
«Esos ventiladores Eternity SH 300 importados tuvieron eventos adversos con pacientes y dejaron muertes, porque se desconectaba. Recordemos que eso funciona como los pulmones de una persona y si se pausa, la persona muere por falta de oxígeno. Por eso dimos la orden de suspender su uso. Hay 34 reportes de estos eventos adversos y fallas de estos equipos», explicó.
Finalmente, mencionó que el uso de un ventilador tampoco es tan fácil de usar, por lo que ahí está la importancia de las unidades de cuidados intensivos.
«El ventilador solo no se puede utilizar, debe ir acompañado de un profesional y en un cuidado de salud. Es un conjunto de cosas. MinSalud ha hecho un gran esfuerzo para aumentar camas UCI«, finalizó.