A pesar de las dificultades que presentaron todas las universidades y las instituciones educativas, para atender presencialmente las actividades educativas por la pandemia del Covid, que lesionó ostensiblemente el bienestar general de todas las familias del mundo, incluidas las colombianas durante cerca de dos años, fue la aplicación de las Tics en el desarrollo de sus clases. Uno de los factores cruciales para la positiva dinámica de la economía colombiana de los últimos meses ha sido la decisión de la reapertura total de la mayoría de los sectores productivos. Ésto ha conducido al retorno de comercios, conciertos, bares y discotecas y al impulso del empleo en esas actividades. Por tal motivo el regreso a la presencialidad de las clases se convierte en un objetivo de las autoridades educativas y de la salud, para volver a recuperar la dinámica académica que se tenía antes de que iniciara esta tragedia sanitaria.
Y fue así que, para el inicio del presente semestre, la mayoría de las universidades públicas y privadas iniciaron sus clases de manera presencial y muchas otras lo hicieron con alternancia, con el fin de ir adecuando sus aulas escolares, sus presupuestos y la logística educativa para brindarles a todos los estamentos un regreso progresivo a la total presencialidad. Así lo está realizando la Esap a nivel nacional y en el caso particular de la Territorial Huila, Caquetá y Putumayo. Ha sido un total éxito, porque se ha logrado expandir sus programas a nivel de pregrado y educación superior avanzada, en 22 Cetaps, brindándoles la oportunidad a más de 1.500 estudiantes matriculados de estas localidades apartadas para que continúen sus estudios universitarios.
Claro está, que no todo es color de rosa. En algunos Cetaps, se han presentado algunos inconvenientes logísticos, para atender esta demanda estudiantil. Pero hay que reconocerle al director Eduardo Corredor Torres, quien, junto a su equipo de trabajo, han logrado sortear poco a poco la adecuación de las aulas y del equipo de profesores para sacar avante esta loable tarea. Paralelo a lo anterior, los estamentos de la Esap esperan que el gobierno nacional, cumpla con lo prometido para construir la sede definitiva de las instalaciones donde va a funcionar la Escuela en la capital del departamento.
Todos sabemos que cada día, la utilización de las plataformas tecnológicas, que se han venido utilizando para el desarrollo de las clases durante el periodo de la pandemia, llegó a nuestros hogares y en el futuro se seguirán utilizando, como un medio adicional para fortalecer los procesos de enseñanza aprendizaje. Pero que, complementado con la presencialidad, se convierten en un potencial instrumento para fortalecer estos procesos educativos. No podemos negarnos a eso. Para algunos expertos en educación, consideran que cuando no se tienen las clases presenciales, entonces los estudiantes dejan de asistir a los salones de clase, se infringe un enorme daño a su proceso educativo y se materializa un rezago que para de crecer. Recordemos que el sistema de clases adoptado por la Esap es semipresencial y la virtualidad complementa este sano propósito en la formación de nuestros estudiantes. Así todas las sesiones sean presenciales, adonde vamos a llegar, la Tics son una potente herramienta para complementar esta formación universitaria. Así lo están haciendo la mayoría de las grandes universidades del mundo. La Esap no puede ser la excepción.
