DIARIO DEL HUILA, PRIMER PLANO
Por: Johan Eduardo Rojas López
Fotografías: José Rodrigo Montalvo
Tradicionalmente, en esta época del año se incrementa el consumo del pescado en diversas presentaciones, así pues, tras dos años de pandemia y restablecerse la presencialidad en estas celebraciones, las expectativas del sector piscícola son altas. Sin embargo, los comerciantes de ‘La Circunvalar’ advierten ventas bajas hasta el momento y esperan su incremento.
Estamos a cuatro días exactos de dar inicio a la Semana Santa, una época del año en la que culturalmente se consume pescado, por ello, los comerciantes y productores se preparan para una de las épocas más prometedoras del año.
Aunque las expectativas en general son altas, no todos están bajo las mismas condiciones, pues mientras los pescadores y comerciantes ubicados a un costado del río Magdalena en el sector conocido como ‘La Circunvalar’ no han registrado hasta el momento ventas significativas, según la Secretaría Técnica de la Cadena Piscícola del Huila, el balance actual es positivo.
Armando Lazo, comerciante de pescado criollo de ese sector, indicó que, “la realidad es que el pescado está subiendo de precio cada día. Todas las clases de pescado han aumentado y las ventas no están mejorando. Algunos han tenido unas tácticas de hacer domicilios, han pasado publicidad en plataforma y les ha funcionado, pero otros no. Esto es solo, pero estamos esperando que mejoren las ventas.”
En efecto, los comerciantes de esa zona se encuentran preocupados por la situación, pero con la firme esperanza de que todo mejore próximamente durante la Semana Santa que en esta oportunidad, se realizará del 10 al 16 de abril.
Sector Piscícola
Por su parte, Edisson Henao, secretario técnico de la cadena piscícola del Huila, sostuvo en diálogo con el Diario Del Huila que, “el ejercicio de semana santa en un país con creencias cristianas define el aumento del consumo del pescado en esta temporada que es bastante fuerte. El gremio efectivamente se prepara desde el mes de agosto iniciando con las siembras de sus Alevinos para precisamente poder cubrir la demanda en esta época del año. Creemos que el 35% y 40% de la producción es comercializada en esta época, teniendo en cuenta que nuestros pequeños productores solamente cosechan dos veces al año, una de esas cosechas es precisamente en la Semana Mayor.
De esta manera, mencionó que ya están preparados para asumir positivamente esta época del año. “Efectivamente tenemos oferta del producto para poder llegar a los hogares colombianos y opitas, con un producto fresco y de buena calidad. El año pasado se produjeron cerca de 73.000 toneladas, estamos hablando que estamos en el orden de las 28.000 toneladas que pueden estarse comercializando durante la Semana Santa del 10 al 16 de abril. La presencialidad de los actos religiosos no representa que aumente o disminuya el cultivo del pescado, es más por cultura que se realiza el consumo durante el jueves, viernes y sábado santo exactamente.”, dijo Henao.
Adicionalmente, confirmó que el primer año de pandemia sí afectó al gremio porque todo estaba cerrado, no había acceso para llegar a las plantas de proceso, la cosecha se postergó para mediados de abril y el confinamiento empezó el 19 de marzo, a pocos días de iniciar la Semana Santa. Sin embargo, el segundo año el desarrollo fue bastante normal y este año que se reactivó gran parte de la economía esperan seguir manteniendo todo de manera positiva.
Asimismo, enfatizó en que este momento particular puede ser de gran impacto para el gremio. “Creo que en este momento la Semana Santa va a ayudar un poco al incremento del consumo del pescado en el país, teniendo en cuenta los altos costos del pollo y la carne. Esta semana la población colombiana va a salir a consumir pescado y se dará cuenta que el precio es más bajo que los otros productos. Entonces creemos que eso nos puede ayudar para disparar un poco el mercado y también pensando en el incremento de los costos de producción y el costo del productor si se sigue mantenido, puede ser una oportunidad para los productores”.
“Lo importante es saber en dónde compramos el pescado, mirar que se conserve la cadena de frío; el pescado es un producto altamente perecedero y nuestra temperatura puede afectar la calidad de la carne. Las principales características que debemos observar son: el color de los ojos, el brillo de las escamas, el color de la branquia o agallas, evitemos una intoxicación o cualquier situación que se nos pueda presentar por descomposición del producto.”, dijo el Secretario Técnico refiriéndose a consumo seguro del pescado.
Además, también hizo referencia a las declaraciones de los comerciantes y pequeños productores, aseverando así que, “efectivamente, algunas personas se proveen antes de la Semana Santa, teniendo en cuenta que la demanda aumenta y el precio por consiguiente puede tender a aumentar. Puede que esta semana disminuya un poco porque todos se están preparando para los días santos como tal. Evidentemente, el pescado está saliendo y los invito a que hagamos las cosas de manera responsable.”
Recomendaciones en el consumo
De igual modo, el doctor Cesar Alberto Polanía, secretario de Salud del Huila, insistió en que, la primera recomendación es comprar en sitios seguros y que estén siendo vigilados por la Secretaría de Salud Departamental, “dichos lugares deberán estar limpios, con personal debidamente capacitado y con su dotación de color clara.”, anotó el funcionario.
En cuanto a la elección de pescado fresco, la autoridad de salud señaló las siguientes recomendaciones:
Carne: En pescado muy fresco al tacto, su carne debe ser firme y elástica y la superficie lisa. En un pescado en mal estado su carne al tacto es blanda y su superficie es granulosa.
Olor: Tiene que oler a humedad limpia del mar o agua dulce según su clase, cuando el pescado está en mal estado tiene olor a agrio no convencional.
Ojos: Deben ser esféricos, salientes en la mayor parte, transparente y de córnea limpia. Entre más fresco el pescado la forma del ojo es convexa (hacia fuera) y a medida que pierde la frescura esta se va aplastando hasta llegar a una forma cóncava (hacia adentro) cuando está en mal estado. Su pupila es negra y brillante cuando el pescado es fresco y pasa a gris cuando está en mal estado.
Agallas: Deben ser de color rojo vivo en la mayor parte de las especies y rosa en otras. Suaves y resbaladiza al tacto. Cuando está en mal estado sus agallas toman un color amarillento. Cuando el pescado está fresco sus agallas no presentan mucus, y a medida que se va descomponiendo esta aparece hasta tener un aspecto lechoso.
El sector pesquero opina
Lilian Capera, pescadería Crismayer
“Somos proveedores de los módulos y repartimos el pescado. El pescado está escaso y en el mercado está bastante incrementado de precio. Las ventas están malas, porque todo está bastante subidito de precio. Esperamos que la gente salga a comprar el producto.”
Tatiana Rodríguez, vendedora en la pescadería la Piragua
“Las ventas estos días han estado bastante movidas, se ha vendido mucho lo que es la tilapia, mojarra, bagre, cazuela de marisco y camarón. Creemos que se va a vender bastante y hacemos domicilio, por ahora, todo está marchando muy bien, sin ningún problema.”
Angelica Gómez, vendedora ambulante de pescado
“Estamos en la temporada del pescado seco y mojado porque llega la Semana Santa. Tenemos bocachico, bagre, cachama, pirarucú y otras clases. Apenas estamos empezando con las ventas, esta es la primera semana y la buena es la otra semana porque son ocho días de ventas. Por ahora, están las ventas regulares, pero esperamos que se venda pronto. Las ventas de este año a comparación del pasado, son superiores. Esos años de cuarentena casi no hubo venta, había pescado, pero casi no compraban porque la gente estaba encerrada.”