José María Ballesteros se enfrentará de nuevo a los estrados judiciales porque habría generado un detrimento a la Gobernación de La Guajira por $13.253 millones, originado en dos contratos para llevar alivios a estudiantes de bajos recursos en materia de transporte y alimentación.
El exgobernador de La Guajira, está una vez más en el banquillo de los acusados de la Corte Suprema de Justicia, investigado por irregularidades en dos contratos que tenían como objetivo suministrar alimentación y transporte escolar a estudiantes del departamento. La presunta falta ocurrió en 2015 mientras fue jefe departamental y decidió dar continuidad a los programas de La Guajira Primero, que implementó la antigua administración.
Entre tanto, el expediente en su contra empezó en diciembre de 2020 por los delitos de contrato sin cumplimiento de requisitos legales y peculado a favor de terceros. Por ahora, será acusado ante la Sala de Primera Instancia del alto tribunal.
