Diario del Huila, Primer Plano
Por: Juan Manuel Macias Medina
Otro sector que ha resultado fuertemente golpeado por el impacto de la pandemia, es el gremio de transportadores escolares, según ellos, desde el mes de marzo del año pasado no han podido recibir ningún ingreso, cuestión que pone en vilo la labor que realizan, pues las deudas no esperan y la quiebra es latente.
Para Víctor Soto, líder del gremio de transportadores escolares, la situación es compleja, pues debido a que no hay estudiantes, no han podido trabajar, por lo que casi en su totalidad, los transportadores se encuentran en quiebra.
“La situación es muy compleja, el 99% del gremio de transporte escolar estamos en una agonía total, la reactivación en nuestro sector ha sido muy difícil, ya hemos visto varios compañeros de las empresas que han quebrado en vista de que no hay absolutamente nada que hacer”, indicó el líder.
Ya se va a cumplir un año desde la llegada del coronavirus a tierras colombianas, desde ese momento, la preocupación se apoderó de las empresas y personas que realizaban esta labor.
“Nosotros prestábamos el servicio del transporte escolar con más de 2.000 vehículos, prácticamente todos los automotores están parados desde el pasado mes de marzo. En estos momentos si la ciudadanía pasa por los parqueaderos, encuentran un cementerio de vehículos de servicio especial”, manifestó el vocero.
Según los líderes del gremio de transportadores escolares, casi el 100% de los trabajadores de este gremio se encuentran en quiebra.
Según Soto, las autoridades deben tomar medidas pertinentes para poder darle solución a este problema. Los transportadores aclararon que respetando las medidas de bioseguridad, se podría ejercer nuevamente la labor.
“Pensamos que deberíamos estar reactivándonos todo el sector, sabemos de todas las complicaciones que trae consigo la pandemia, sabemos también lo que se puede generar a raíz de esto, pero adoptando todos los protocolos de bioseguridad y cuidándonos, podemos ejercer nuestra labor”, aseguró.
El regreso a clase es una de las principales exigencias de este importante sector, según ellos, es la principal fuente de trabajo.
“Si los niños comienzan a ir a los establecimientos educativos sería una bendición, no solo para el transporte escolar, sino para muchos sectores que están también preocupados por el cierre de los colegios”, dijo el vocero de los transportadores escolares.
Así mismo, Víctor Soto dijo que son cerca de 60.000 niños los que utilizaban este tipo de transporte para llegar a sus colegios, lo que evidencia el gran golpe económico que, según indican, atraviesa este sector.
“El gremio en diferentes contratos estábamos transportando cerca de 60.000 niños en todo el territorio huilense, pero ahora la situación está muy complicada por el tema de la pandemia. En estos momentos estamos llegando a un 80% de empresas que llegan a la quiebra, pero no solo son las empresas las que resultan afectadas, sino también los transportadores que viven de su vehículo, y con esta situación es imposible subsistir, estamos llegando al mes once y la situación está muy crítica”, expresó el líder del gremio.
Soto no perdió la oportunidad para exigir a las autoridades que busquen la manera para reactivar este sector económico, según él, no solo son las empresas las que se han visto afectadas, sino los transportadores que, en su momento, adquirieron alguna deuda y no han podido pagar por la crisis.
“Le pedimos a los gobiernos nacional, departamental y municipal que miremos las maneras de reactivar todos los sectores porque todos necesitamos y estamos requiriendo de ese empujón que sabemos, nos va a ayudar mucho. Estamos hablando de pérdidas millonarias, están dejando de recibir ingresos no solo las empresas sino también los transportadores, había muchos que tenían compromisos bancarios y con la situación es imposible pagar, yo creería que estaríamos hablando de más de $200.000 millones en todo el sector transportador. Las empresas que trabajamos con el tema escolar, estamos dejando de facturar un promedio de $20.000 millones en el departamento del Huila.
Las pérdidas del sector debido a la emergencia sanitaria, ascienden a los $200.000 millones.
