DIARIO DEL HUILA, REGIONAL
Por: Daniela Gutiérrez
La Bolsa Mercantil de Colombia suspendió el contrato de suministro del programa de alimentación PAE en el Municipio de Pitalito a la Fundación Senderos y Caminos, afectando a cerca de 11 mil estudiantes de las 152 sedes educativas de la capital laboyana. Gran parte de la población estudiantil completaron 6 meses sin este beneficio. “Es una canallada”, declaró María Eugenia Herrera Gutiérrez, promotora de la revocatoria del mandato del alcalde de Pitalito sobre lo sucedido con el programa de alimentación.
Por $4.006.183.700 de pesos estaba adjudicado el contrato de alimentación para los niños, niñas y adolescentes de las Instituciones Educativas del Municipio de Pitalito que fue entregado por medio de contratación pública a la Fundación Senderos y Caminos; proceso que fue realizado por la Bolsa Mercantil de Colombia quien hoy decreta incumplimiento y retira el contrato a dicho operario.
“En mayo del presente año fue presentado un requerimiento por parte de la Alcaldía de Pitalito a través de la Secretaría de Educación con motivo del incumplimiento de la Fundación Senderos y Caminos al contrato para implementar el Programa de Alimentación Escolar (PAE) en el municipio, el cual le fue adjudicado a través de la Bolsa Mercantil de Colombia (BMC). Cabe destacar que BMC es un escenario de negociación de productos agropecuarios e industriales vigilado por la Superintendencia, apéndice de la Contraloría General de la República, y es actualmente la encargada de asignar la nueva contratista del PAE para el Valle de Laboyos”, indicó el secretario de Educación Carlos Alberto Martín Salinas.
Según enfatizó el Secretario, fueron 6 semanas las que esperaron iniciando el contrato con el fin de que el operador diera cumplimiento al mismo, “las 2 primeras semanas empezaron con 80 sedes y después lograron aumentar levemente como a 120, pero nunca nos hicieron un cubrimiento total”, aseveró.
Inconvenientes con el pago a los proveedores fue el primer tropiezo que tuvo el contrato por lo cual presentaban incumplimientos con el suministro de cárnicos, cereales, los productos provenientes de Fruver y en general todo lo que se compraba para la alimentación de los estudiantes.
“Al principio les abrieron el mercado, pero cuando se dieron cuenta que pasaban 15 días y no cancelaban las deudas, comenzaron a cerrarles y en ese sentido, también empezaron a fallarle a las 104 de las 152 sedes que debían suministrar el alimento. Comenzó a llegar el mercado por días; no todos los días y se perdía la alimentación de 2 a 3 días a la semana”, relacionó el funcionario.
Se brindaron soluciones
Teniendo en cuenta que lo que prevalecía era el derecho a la alimentación de los niños, niñas y adolescentes, la administración pública trató de llegar a acuerdos con el operador en cuanto a las raciones preparadas en sitio y propuse raciones industrializadas mientras se lograba subsanar el problema.
“Nosotros les dimos todas las garantías, les brindamos tiempo para que conocieran la región, llegaran a los corregimientos porque sabemos que Pitalito tiene una zona rural bien grande, además tuvimos en cuenta que el número de sede es alto, pero la verdad es que no pudieron”, confesó Martín Salinas.
Así las cosas, la Bolsa Mercantil de Colombia decidió dar terminación unilateral del contrato por incumplimiento total. 11 mil menores de edad son los que se han visto perjudicados en este aspecto pues la gran mayoría lleven todo el primer semestre de calendario escolar sin suministro del PAE.
“Es preferible que haya una interrupción y podamos entregarles a todos y no a un poquito, que le entreguemos a unos y a otros no. Entonces estábamos funcionando muy mal. Esperamos tener un poco más de suerte ahora que vuelva a empezar”, contó el secretario de Educación.
Nuevo inicio
Lo que viene es que la BMC volverá a hacer pública la convocatoria para poder escoger un nuevo operador que brinde las garantías necesarias para que los infantes una vez regresen de vacaciones de mitad de año, puedan contar con el programa de alimentación en todas las 152 Instituciones Educativas.
“Ellos abren la convocatoria y esperan que en 12 días aproximadamente tengan nuevo operador con el fin de ahora sí poder cumplirle a los estudiantes con este programa que sólo busca el beneficio de ellos”, insistió.
El Alcalde de la municipalidad, Edgar Muñoz se pronunció también al respecto. “Celebro que la denuncia que hicimos frente a los incumplimientos de este operador, al mismo se le haya cancelado el contrato. Hemos pensado en hacer una ampliación hasta el último día de noviembre con relación a la entrega de los suministros con el fin de subsanar todo este tiempo que se perdió”, dijo.
Es de anotar que los recursos con los que cuenta actualmente la Administración Municipal para tal fin son de $3.600 millones de pesos con los cuales deben dar continuidad al programa. Se ha pensado en hacer adiciones para completar hasta finales del mes de noviembre la entrega del PAE.
“La Fundación se gastó aproximadamente $450 millones de pesos que toca girarlos, una vez ellos presenten la primera cuenta; ya que ellos la presentan es en el segundo mes de ejecución, con lo que ellos deberán de pagar el transporte y a las manipuladoras ya que le deben a todo el mundo. Lo que descubrimos es que ellos no tenían dinero para iniciar y ese fue el motivo del incumplimiento”, concluyó Muñoz.
“Esto es una canallada”
María Eugenia Herrera Gutiérrez, promotora de la revocatoria del mandato del alcalde de Pitalito dio fuertes declaraciones sobre lo sucedido con el programa de alimentación. “Lo que hicieron en Pitalito con la contratación del PAE es una canallada, son unos atrevidos al jugar con los alimentos de los menores, nunca habíamos estado ante un gobierno de tal magnitud como el de este momento”, manifestó.
Herrera Gutiérrez manifestó que sacar un contrato a través de una Bolsa Mercantil, aunque puede ser garantía de legalidad, es muy costoso por la esencia del contrato jurídico que se realiza, de los corredores que trabajan tanto de la parte contratista como de los contratantes por tal motivo “lo que pretendía ser algo positivo, terminó convirtiéndose en lo que se veía venir; un total fracaso”, aseveró.
Según la promotora, este programa es tan necesario en Pitalito, como en toda Colombia pues, “es la garantía de que los estudiantes no aguante física hambre, luego de una crisis tan dura como fue la pandemia y la recesión económica que estamos viviendo, hoy el municipio de Pitalito ha contribuido a que le hambre en nuestros niños, niñas y adolescentes sea su compañero durante lo que queda de este semestre y ojalá no sea durante todo el año”, concluyó.