La Fiscalía General de la Nación logró una sentencia de 27 años de cárcel para cinco individuos involucrados en la desaparición y posterior asesinato del comerciante de celulares Ezequiel Martínez Lugo en Acevedo, Huila, un trágico evento que conmocionó a la comunidad en enero de 2019. Este macabro suceso, que marcó un precedente en la lucha contra la desaparición forzada en Colombia, reveló un acto de atrocidad y premeditación por parte de los condenados. La víctima fue engañada bajo falsas promesas y luego desmembrada, con sus restos arrojados al río Magdalena en bolsas plásticas.
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Entre los sentenciados se encuentra un miembro de la Policía Nacional, lo que agrava aún más la gravedad de este crimen. Los individuos condenados son los hermanos Henry y Fredy Espinosa Guevara, John Jairo Plaza Facundo, Henry Soto Majé y el patrullero Henry Mejía Orozco. Las investigaciones lideradas por un fiscal especializado en Violaciones a los Derechos Humanos de la Fiscalía revelaron que estos individuos formaban parte de una red de narcotráfico implicada en la distribución de clorhidrato de cocaína en los departamentos de Cauca y Caquetá.
La motivación detrás de este brutal acto, según la autoridad competente, radica en un aparente desacuerdo con una organización criminal dedicada al tráfico de estupefacientes. “La víctima había recibido varios kilos de coca para su venta, sin embargo, no reportó el dinero producto de la misma, ni devolvió la citada mercancía”, explicó la Fiscalía, destapando el oscuro trasfondo de este caso.
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El fallo revocó una decisión previa que había absuelto a los implicados debido a la falta de pruebas concluyentes. La determinación del juez en esa instancia se basó en un exhaustivo análisis de las evidencias y testimonios recopilados por el Fiscal Especializado contra Violaciones a los Derechos Humanos.
