En la Amazonía peruana, las abejas nativas sin aguijón ayudan a los apicultores y sus comunidades a producir miel y polinizar las plantas locales.
DIARIO DEL HUILA, MEDIO AMBIENTE
Las hay en muchos colores: dorado, ónix sólido o diente de león rayado y canela. Sus ojos pueden ser de color negro brillante, gris pizarra o incluso verde azulado. Sus cuerpos pueden ser tan pequeños como lentejas o tan grandes como uvas para vino. Pero lo más sorprendente de las abejas sin aguijón son las mieles que producen, que son cada vez más buscadas como alimento y medicina.
En la Amazonía peruana, la gente apenas está comenzando a criar algunas de las 175 especies diferentes de abejas sin aguijón del área, que prometen ayudar a los apicultores y sus comunidades. Históricamente, este tipo de miel se ha recolectado típicamente de la naturaleza, lo que destruye las colmenas.
Pero en los últimos años, científicos como César Delgado, del Instituto de Investigaciones de la Amazonía Peruana (IIAP), están enseñando a la gente a criar y mantener a los insectos de manera sostenible.
La bioquímica y exploradora de National Geographic Rosa Vásquez Espinoza se ha asociado con Delgado y sus colegas para comprender mejor a las abejas, lo que polinizan y los contenidos bioquímicos de su miel medicinal.
Además de estar fascinada con los insectos y sus productos, quiere ayudar a defender la apicultura sin aguijón debido a todos los beneficios que las abejas brindan a las comunidades que las crían, muchas de las cuales se han visto muy afectadas por la pandemia de COVID-19.
“Las abejas sin aguijón están devolviendo la vida a la amazonía”, dice Espinoza, al proporcionar miel medicinal, ingresos y beneficios de polinización a una región que necesita ayuda.
‘Líquido milagroso’
Hay una larga y rica historia de uso de mieles como medicina, especialmente en la antigüedad. Algunos registros muestran que las personas han usado la miel como bálsamo, embriagante, sustancia psicoactiva o como veneno. Múltiples estudios contemporáneos sugieren que las mieles de abejas y abejas sin aguijón tienen propiedades antimicrobianas, antiinflamatorias y cicatrizantes.
Las abejas sin aguijón producen miel con sustancias químicas que evitan el crecimiento de microbios y hongos, una adaptación para evitar que la sustancia se eche a perder en los trópicos. Dada la gran variedad de biodiversidad de plantas en el Amazonas y la increíble variedad de productos químicos botánicos que las abejas mezclan en sus mieles y ceras, tampoco sorprende que tenga valor medicinal. De hecho, algunos llaman a esa miel un «líquido milagroso».
Las personas en los trópicos ya usan varios tipos de mieles de abejas sin aguijón y cera de sus colmenas para tratar infecciones de las vías respiratorias superiores, afecciones de la piel, problemas gastrointestinales e incluso para tratar la diabetes y el cáncer. Aunque la investigación ha comenzado a brindar un indicio de apoyo para algunos de estos usos, gran parte de ella aún es preliminar. Se necesitan con urgencia más investigaciones sobre los beneficios medicinales de las mieles, dice David Roubik, un experto en abejas sin aguijón del Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales en Panamá.
“Usamos la miel como alimento y medicina”, dice Heriberto Vela Córdova, apicultor de san francisco, Perú, que forma parte de la comunidad indígena kukama-kukamiria. “para la comida lo usamos con café, pan. como medicina lo usamos para bronquitis, neumonía, quemaduras, cortes en la piel, resfriados, artritis”.