Dentro del abanico de candidatos que se están disputando la Presidencia de la República, surgen propuestas desesperadas con el fin de cautivar al constituyente primario, con el fin de brindar soluciones a problemas coyunturales que posee la sociedad colombiana. Mientras transcurría la semana santa, un emisario del candidato Gustavo Petro Urrego, precisamente su hermano, estuvo visitando a algunos delincuentes en la cárcel de la Picota para ofrecerles un perdón social, a cambio de votos y, con el fin de conciliarse con dichas estructurales criminales. La reacción de la ciudadanía fue inmediata. Mientras se busca que se castiguen severamente las conductas que han atentado contra el erario y la vida de las personas, es inadecuada e inconveniente, esta iniciativa que busca una rebaja de penas a todos los cerebros de dichas organizaciones que ha generado un ambiente malsano al bienestar de las familias.
Pedro Niño, abogado del condenado exgobernador de La Guajira Francisco ‘Kiko’ Gómez, gestionó el ingreso de Juan Petro y de un vocero de una ONG. Y aunque el abogado Niño se lo negó a Noticias Uno, en La Picota lo señalan de socializar un documento de perdón y punto final para condenados, que incluye hacerle el quite a la extradición. Ahora que tienen en contra a la opinión pública nacional, las directivas de dicha campaña han querido negar y disminuirle la intensidad al tsunami de críticas y de rechazos que ha recibido desde todos los ángulos de la opinión pública. Se ha vuelto recurrente las salidas en falso de este candidato de la oposición al gobierno nacional y que le están generando réditos negativos para avanzar con su aspiración presidencial. Cada vez que lo hace, ya nadie cree en sus expresiones aclaratorias y bizantinas. Se volvió una vergonzosa propuesta que inclusive sus amigos de la izquierda la han catalogado así, porque se está acudiendo al todo vale para ganar la presidencia. En muchas ocasiones, el desespero electoral conlleva a lanzar estas propuestas inconvenientes y absurdas.
El mismo candidato Fico Gutiérrez aprovechó la oportunidad para expresar tajantemente, que personas que trasgredan el Código Penal Colombiano, como los que están negociando sus penas con el Candidato de la oposición, deberán tener condenas superiores a los 40 años, e inclusive se eliminarán las casas por cárcel y los hoteles de cinco estrellas de algunos centros de reclusión, donde se encuentran algunos reos sentenciados. Habrá muerte política a los servidores corruptos.
Es muy importante que se escuchen a los candidatos presidenciales, sobre sus propuestas para superar las grandes problemáticas estructurales que posee la sociedad colombiana y que producto de la polarización política en que se ha centrado los debates donde participan, no se escuchan dichas soluciones. El pueblo colombiano está hastiado de estos enfrentamientos absurdos.
