En medio del caótico ambiente político que atraviesa la nación, el fiscal Francisco Barbosa hizo un comunicado desde Boston, Massachusetts, donde adelanta una visita pidiendo al jefe de Estado que considere sus últimas decisiones que provocaron la segunda crisis de gobierno en ocho meses.
El fiscal abogó por «calma» y «serenidad» del presidente Gustavo Petro, quien reemplazó a 7 de sus 19 ministros y destituyó a 7 de ellos el miércoles luego de enfrentar al expresidente César Gaviria en su enfrentamiento más desafiante hasta la fecha.
“Tranquilícense todos, presidente Petro, diría yo. La democracia es un fenómeno de concertación; de hecho, el discurso civil en la política es necesario. La democracia incluye eso. El fiscal Barbosa afirmó que la fiscalía, por ejemplo, “no cuestionaria temas políticos en las investigaciones”.
Sin embargo, la conversación entre el presidente Petro y César Gaviria, expresidente y líder del Partido Liberal, fue el mayor «tirón de orejas» de Barbosa. Esta discusión fue desatada por una severa carta que Gaviria escribió a sus congresistas en la que amenazaba con imponerles sanciones si votaban a favor de la divisiva reforma de salud que el gobierno está presentando ante el Congreso.
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Tras estos hechos, el jefe de Estado amenazó con presentar una denuncia ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos porque, a su juicio, se habían violado los derechos políticos de la bancada liberal.
Según Barbosa, «no es posible utilizar el sistema interamericano» para resolver este tema y «en todo lo relacionado con los partidos políticos y la política, hay un gran margen de apreciación que permite a los Estados resolverlo internamente». Y prosiguió “Para la construcción conjunta de un Estado como el colombiano se requiere serenidad y tranquilidad”, declaró Barbosa.
“La democracia no es una democracia de imposición, sino de acuerdo”, Barbosa en su declaración final. En cambio, cuando alguien está de acuerdo, da vida a la democracia y al Estado social de derecho. Cuando alguien impone, astilla por completo a la nación.
Con esta nueva discusión, Petro y Barbosa continúan con sus desencuentros, que existen entre ellos desde el inicio del gobierno y parecen agudizarse. Los proyectos de paz casi inclusivos del gobierno y la reforma de la justicia habían generado críticas del fiscal en meses anteriores.
