El miércoles 15 anterior falleció a los 91 años en Bogotá, el excongresista Fernando Ospina Hernández, hijo del expresidente de la República Mariano Ospina Pérez y Bertha Hernández de Ospina. Había contraído matrimonio en 1954, con la distinguida dama huilense y exministra Olga Duque Palma. Durante su trayectoria en esta vida terrenal en los sectores público y privado, deja una huella indeleble a todas las nuevas generaciones, por su liderazgo, honestidad y visión que tuvo como político y empresario. Hablaba tres idiomas: español, inglés y alemán. Fue uno de los promotores y fundadores de la firma PROHUILA, donde se diseñó e impulsó la ampliación urbanística de la capital del departamento a través del proyecto urbanístico “Neiva la Nueva”. Fue el fundador del Jardín Botánico de Neiva, “Bertha Hernández de Ospina”.
Adelantó estudios de ingeniería eléctrica en la Virginia Military Institute en los Estados Unidos. En Colombia fue miembro fundador de varias entidades, entre ellas el Instituto Colombiano de Normas Técnicas y Certificaciones, Icontec; la Asociación Colombiana de Coleccionistas de Armas, el Museo Militar de Colombia, la Asociación Colombiana de Ingenieros Eléctricos, Mecánicos y Afines, Aciem, entre otras iniciativas.
Desde joven se inició en las lides políticas de su departamento, donde fue escalando posiciones hasta llegar al Congreso de la República, destacándose por su liderazgo en el Partido Conservador donde militaba. Amante a la naturaleza, investigó junto al distinguido docente emérito investigador Jorge Reynolds, sobre el lenguaje y el corazón de las ballenas. Igualmente fue un escritor consumado, autor de varios libros y columnista de varios periódicos nacionales y regionales del país.
Tras su fallecimiento, deja a los huilenses un recuerdo grato indeleble, por su destacado liderazgo cívico empresarial. Fue un soñador empedernido para que la sociedad colombiana fuera justa, más equitativa, respetuosa de las normas, amante de las sanas costumbres y con un futuro brillante a pesar de las dificultades que presenta la democracia en nuestro país. Con un pensamiento que nos enseñaba a estructurar grandes proyectos de desarrollo para el departamento y el país, lo recordaremos siempre por su carisma y el don elegante de un caballero, que impregnó siempre un respeto y una mirada respetuosa de los grandes líderes políticos y empresariales del país, cuando hacían las cosas correctas en beneficio de la sociedad colombiana.
“La sociedad huilense lamenta profundamente la pérdida de un gran hombre, ilustre de nuestras tierras opitas que visionó el crecimiento de la ciudad de Neiva, y que aportó al desarrollo estructural del municipio”, expresó el alcalde Gorky Muñoz Calderón.
Adenda: Esta Casa Editorial, le expresa a toda su distinguida familia nuestras condolencias y sentimientos de pesar por el fallecimiento de uno de los políticos y empresarios más ilustres y destacados del Siglo XX. Paz en su tumba.