Germán Morales, alcalde del municipio de Teruel, Huila, denunció que ha recibido en reiteradas oportunidades amenazas por parte de grupos al margen de la ley.
Estas intimidaciones han escalado en frecuencia e intensidad, sumando a la creciente preocupación por la seguridad en la región.
En un reciente consejo de seguridad realizado en Neiva, se discutieron las alteraciones del orden público causadas por estos grupos en Huila. Morales reveló que las amenazas comenzaron hace aproximadamente siete meses y se han manifestado a través de llamadas telefónicas, avisos de la comunidad y visitas directas a la alcaldía.
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“Las hemos recibido por llamadas telefónicas, por la comunidad que va a dar la razón y por ellos mismos que han ido hasta el despecho de la alcaldía”, declaró Morales a los medios de comunicación. A pesar de haber presentado las denuncias correspondientes y someterse a un estudio de seguridad, la Unidad Nacional de Protección (UNP) no ha implementado medidas efectivas para su protección. “Nos brindaron un vehículo convencional pero un vehículo convencional no nos garantiza la seguridad”, añadió el alcalde.
Morales también indicó que las amenazas han ido acompañadas de intentos de extorsión y que, a pesar de sus advertencias sobre los riesgos en el municipio, las disidencias de las Farc atacaron recientemente la estación de policía de Teruel. Afortunadamente, el ataque no dejó víctimas.
En respuesta a la situación, el gobernador del Huila expresó su preocupación y aseguró que están buscando formas de apoyar al alcalde. “La situación del burgomaestre es preocupante y estamos estudiando la manera de apoyarlo de la mejor manera, pero son trámites burocráticos los que existen para acceder a un carro blindado. Y ya llegó a Neiva un contingente de la Policía, quienes reforzarán las estaciones que fueron atacadas”, señaló el gobernador.
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