La emisión de la alerta naranja por parte del Servicio Geológico Colombiano ha generado preocupación en 21 municipios cercanos al Volcán Puracé, en el departamento del Huila, ante la posibilidad de una erupción volcánica.
Diario del Huila, Panorama
La tensión se ha elevado en los municipios cercanos al Volcán Puracé, que hace parte de la cadena volcánica Los Coconucos y está ubicado en el departamento del Cauca, al suroccidente de Colombia, luego de que el Servicio Geológico Colombiano (SGC) emitiera una alerta naranja debido a la actividad sísmica registrada en los últimos días. La comunidad, así como las autoridades locales y organismos de socorro, se mantienen en alerta máxima ante la posibilidad de una erupción.
Ante esta alerta, el alcalde del municipio de La Plata, Camilo Ospina, confirmó que desde el Consejo Municipal de Gestión del Riesgo se están tomando medidas preventivas para hacer frente a cualquier eventualidad que pueda surgir.
«Este es un tema que hemos abordado en profundidad dentro del Consejo Municipal de Gestión del Riesgo del municipio de La Plata, en estrecha coordinación con la comunidad, los organismos de socorro y el consejo departamental de Gestión del Riesgo. Hasta la fecha, hemos recibido un comunicado oficial emitido por el Servicio Geológico Colombiano. En dicho comunicado, se alerta sobre situaciones de alerta y posibles alteraciones relacionadas con la actividad del volcán Puracé. Se insta a la comunidad y a los organismos de socorro a mantenerse vigilantes ante cualquier comunicado oficial y los cambios que puedan surgir en relación con el volcán Puracé«.
Ospina subrayó la importancia de mantener una estrecha comunicación con las entidades pertinentes, como el Servicio Geológico Colombiano y el Ministerio de Minas y Energía, para estar al tanto de cualquier cambio en la actividad del volcán.
«Estamos muy atentos a ese canal de comunicación entre el Ingeominas, el Ministerio de Minas, y el consejo municipal de gestión del riesgo del municipio de La Plata«, afirmó el alcalde Ospina.
El mandatario local también señaló que, además de la alerta volcánica, el municipio ha enfrentado dificultades debido a las intensas lluvias asociadas al Fenómeno de La Niña. La Plata, un municipio rural con una extensa red vial, ha visto afectadas sus comunicaciones internas, lo que representa un desafío adicional en medio de la alerta volcánica.
«Somos un municipio rural con una extensa red terciaria que, lamentablemente, se ve afectada por el colapso de las vías de comunicación interna ante las lluvias torrenciales. En este contexto, durante un periodo crucial de cosecha cafetera, hemos coordinado esfuerzos entre los presidentes de juntas y las instituciones pertinentes. Este trabajo conjunto ha permitido la intervención con maquinaria especializada, conocida como ‘maquinaria amarilla’, para despejar y habilitar los corredores viales de mayor importancia. Estos corredores son vitales para la economía local, ya que benefician directamente al sector cafetalero, un pilar fundamental para los habitantes de nuestra comunidad«.
Poblaciones en alerta
La alerta naranja no solo concierne a La Plata, sino también a otros 20 municipios cercanos al área de influencia del volcán, como Pitalito, Acevedo, Elías, Oporapa, Palestina, Saladoblanco, Timaná, Isnos, Garzón, el Agrado, Gigante, Guadalupe, El Pital, Suaza, Tarqui, Íquira, La Argentina, Nátaga, Paicol y Tesalia, que estarían expuestos a la caída de piroclastos con acumulaciones significativas. Esta situación requiere una coordinación efectiva entre las autoridades locales y regionales para implementar medidas preventivas y de respuesta ante una posible emergencia.
Según el último informe del SGC, la actividad sísmica del Volcán Puracé ha mantenido un comportamiento similar en los últimos días, con sismos de fractura localizados principalmente bajo el cráter y en menor proporción en el flanco este.
Además, se han observado procesos de desgasificación al interior del cráter y en la fumarola lateral, con una altura máxima de columna de 150 metros y una dirección de dispersión hacia el noroccidente.
Los niveles de actividad sísmica y desgasificación podrían disminuir o ser oscilatorios en los próximos días, pero esto no indica necesariamente un retorno a la normalidad. El SGC enfatiza que el estado de alerta naranja persiste con cambios importantes en los parámetros monitoreados, y que se necesita un tiempo prudencial para evaluar la estabilidad del volcán antes de considerar un cambio en el nivel de alerta.
En este contexto, las autoridades hacen un llamado a la calma y a seguir todas las instrucciones proporcionadas por la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) y otras entidades competentes. Es fundamental estar atentos a la información oficial emitida por el SGC y evitar difundir rumores o información no verificada a través de redes sociales u otros medios.
Ante la posibilidad de una erupción inminente o el empeoramiento de la situación, el nivel de alerta podría cambiar a rojo, lo que implicaría medidas de evacuación y respuesta más drásticas. Por lo tanto, la colaboración y la preparación comunitaria son fundamentales para afrontar esta situación de manera efectiva y mitigar sus posibles impactos negativos.
John Makario Londoño, director del área de Geoamenazas del Servicio Geológico Colombiano, informó que, hasta el día de ayer, la actividad del volcán Puracé mantenía niveles de alerta similares a los días previos.
«Continúan ocurriendo sismos de fractura en el interior del volcán, así como movimientos de fluidos en proporciones similares a los días anteriores, aunque se ha observado una ligera disminución, la cual es fluctuante«, explicó Londoño. «En resumen, el volcán sigue mostrando una alta inestabilidad, lo que justifica la alerta naranja. Esta situación implica cambios significativos en su actividad, aumentando la probabilidad de una erupción importante, aunque no necesariamente está garantizada«.
Mantener la calma
La entidad indicó que durante el estado de alerta ‘naranja’ el volcán se “puede presentar aumentos de sismicidad de moderados a altos, que pueden estar asociados a la dinámica de fluidos o a fracturas de rocas al interior del volcán, a la deformación considerable de la superficie, a cambios importantes en los niveles de desgasificación (incremento o disminución drástica en la frecuencia de emisiones de SO2 u otros gases magmáticos), al aumento de las alturas de la columna de vapor de agua y gases”.
Adicionalmente, señaló que las manifestaciones superficiales pueden generar algunos fenómenos como emisiones de ceniza frecuentes (erupciones menores), cuyo volumen no afecta de manera importante el diario vivir.
Finalmente, recomendó a la ciudadanía consultar permanentemente la información generada por el SGC sobre la evolución del estado del volcán, y hacer caso omiso de mensajes que circulen por chats de WhatsApp o redes sociales que no provienen de fuentes oficiales.