Jhon Makario Londoño, PhD y director de Geoamenazas del SGC, dio a conocer el actualizado mapa de amenaza volcánica del Nevado del Huila, calificándolo como una herramienta crucial para la prevención.
En un esfuerzo por reforzar la capacidad de respuesta ante eventuales emergencias volcánicas, se llevó a cabo en Neiva el Comité Departamental para el Conocimiento del Riesgo de Desastres. La reunión, liderada por la Oficina para la Gestión del Riesgo de Desastres del Huila, contó con la participación de expertos del Servicio Geológico Colombiano (SGC), quienes presentaron avances significativos en el monitoreo del Nevado del Huila, el volcán más alto de Colombia y una de las principales amenazas naturales en la región.
«El Nevado del Huila es un volcán activo que, aunque se encuentra en un estado relativamente estable, tiene el potencial de realizar erupciones sin previo aviso. Por ello, debemos mantenernos preparados y atentos a cualquier cambio”, afirmó Londoño.
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Avances en monitoreo y lecciones del pasado
Desde la última erupción del volcán hace 16 años, las capacidades de monitoreo han mejorado de manera notable. Según el Dr. Londoño, «ahora contamos con una red mucho más robusta que detecta cambios en tiempo real, lo que nos permite tomar decisiones informadas y actuar con mayor rapidez». Estas mejoras incluyen estaciones sísmicas avanzadas, sensores de gases y análisis de imágenes satelitales, que han optimizado la vigilancia del comportamiento del Nevado del Huila.
Sin embargo, el experto subrayó la importancia de no confiarse: «El avance en tecnología no sustituye la preparación comunitaria. Las estrategias de evacuación y educación son igual de esenciales para minimizar los riesgos».
El Nevado del Huila
Ubicación: Cordillera Central, en los departamentos de Huila, Cauca y Tolima.
Altura: 5,364 metros sobre el nivel del mar, el más alto de Colombia.
Estado actual: Alerta amarilla, lo que indica actividad interna sin señales inmediatas de erupción.
Amenazas principales: Lahares, emisiones de ceniza y gases.
Población en riesgo: Cerca de 100,000 habitantes.
Retroceso glaciar: El cambio climático ha reducido significativamente su cobertura de hielo, aumentando el riesgo de deslizamientos.
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