Luego de que se hallara la avioneta, se escuchó a la abuela de los niños desaparecidos decir: “te están buscando” por medio de altavoces de helicopteros .Tres de los siete pasajeros a bordo de la aeronave solo han sido localizados por organismos de socorro.
La Fuerza Aérea busca a los cuatro menores que continúan desaparecidos luego de escuchar una impactante transmisión de audio desde un helicóptero que sobrevolaba la región selvática de Caquetá, donde fue descubierta la avioneta estrellada que realizaba la ruta Araracuara a San José del Guaviare.
Los niños responden a los nombres Solemni Ranoque Mucutuy 9 años, Tien Noriel Mucutuy 4 años, Crisstin Nerimam Mucutuy 11 meses y Leslie Bombai Mucutuy 13 años. La voz que se transmite desde un helicóptero es la de tu abuela Fátima, quien dice: «Leslie, te pido un favor, que yo soy tu abuela Fátima, me entiendes, tienes que estar callada porque el Ejército te está buscando por tu bien.»
Además, esta mujer conversa con ellos en el dialecto del grupo indígena al que pertenece esta familia, en busca que Leslie, el mayor de sus hermanos, dé señales de vida. Ella dice: «Hija, te agradezco que estés quieta, de pie, si escuchas el micrófono, hija, párate para que te traigan y si te sientes agotada, solo mi Dios lo sabe», para animar a Leslie.
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Lo cierto es que cerca de la avioneta que se estrelló en una zona boscosa de la vereda Palma Rosa del municipio de Solano, Caquetá, se encontraron otras huellas que indican la posibilidad de vida. Debido al persistente mal tiempo de la región, que incluyó fuertes lluvias y tormentas eléctricas, la búsqueda ha sido un desafío. Sin embargo, se decidió aumentar los esfuerzos agregando más tropas y varios perros de búsqueda expertos.
Se conoció que el presidente Gustavo Petro había ordenado utilizar los recursos necesarios para localizar a los otros desaparecidos.
Los cuerpos descubiertos hasta el momento pertenecen a Hernando Murcia Morales, el piloto de Avianline Charter que pudo reportar falla de motor y declarar emergencia ante la torre de control y junto a el Magdalena Mucutuy Valencia, de 33 años, madre de los cuatro niños desaparecidos, y Hermán Mendoza Hernández, exdirector de la Fundación de Profesionales Indígenas Yetara.