La inflación en los alimentos más el acaparamiento de precios, tiene a más de un opita pensativo frente a la compra del tradicional plato, que se consume en gran medida durante esta temporada sampedrina. Comerciantes aseguran que contrario a lo que se cree lo más costoso no es la carne, si no los acompañamientos como la arepa oreja e’ perro.
Diario del Huila, economía
Por: Gloria Camargo
Según el último informe del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), la inflación en Colombia ha experimentado una disminución por segundo mes consecutivo, tras dos años de aumentos sostenidos.
El informe revela que, para mayo de 2023, la inflación se situó en 12,36%, lo que representa una caída significativa en comparación con el pico alcanzado en marzo, cuando alcanzó un 13,34%.
El análisis detalla que el sector que ejerció mayor presión al alza en la inflación fue el de alimentos y bebidas no alcohólicas. Sin embargo, este segmento comienza a mostrar signos de ceder, con una variación negativa de -0,17 puntos porcentuales en mayo.
Aunque esta disminución es alentadora, la inflación actual sigue siendo considerablemente alta en comparación con el mismo período del año pasado, cuando se ubicó en un 9,07%.
A pesar de esta tendencia a la baja, persisten preocupaciones en relación al costo de algunos alimentos en el país. Uno de los ejemplos destacados es el precio del asado huilense, que se mantiene sin ceder. A pesar de los esfuerzos por controlar la inflación, ciertos productos alimentarios continúan siendo afectados por factores como la oferta, la demanda y los costos de producción.
Aunque los datos actuales son alentadores en términos de la disminución de la inflación, es importante mantener un monitoreo constante de los indicadores económicos y tomar acciones oportunas para asegurar un panorama más estable y sostenible en el futuro cercano.
Costos en el 2023
El asado, uno de los platos tradicionales colombianos, ha experimentado un incremento significativo en su precio durante los últimos años. Andrés Jiménez, del reconocido asadero Doña Rosa, reveló que entre 2022 y 2023, el costo de la libra de asado ha aumentado aproximadamente $5.000. Sin embargo, aclaró que este encarecimiento no se debe únicamente al valor de la carne.
Contrario a lo que muchos podrían creer, el precio de la carne en sí no es el factor principal que contribuye al alto costo del asado. Actualmente, la libra de asado, sin incluir los acompañamientos tradicionales como la arepa, el envuelto y el insulso, se sitúa alrededor de los $32.000.
Jiménez explicó que prefieren mantener un precio accesible para que más personas puedan disfrutar de este producto, optando por vender más cantidad a un precio menor.
Es importante destacar que, en diferentes lugares consultados por el Diario del Huila, se ha establecido que el precio de una libra de asado huilense varía entre los $30.000 y $65.000, pero la carne en sí no es el componente más costoso.
Durante el 2022, la libra de carne de cerdo en Neiva oscilaba entre los $9.000 y $14.000, mientras que la costilla de cerdo tenía un precio de entre $7.000 y $10.000. En contraste, la libra de asado se vendía entre $30.000 y $50.000.
En la actualidad, el precio de la carne de cerdo ha mantenido una tendencia similar, situándose entre los $9.000 y los $11.000 por libra, mientras que la costilla de cerdo fluctúa entre los $9.000 y los $12.000. Por su parte, la libra de asado continúa siendo vendida en un rango que va desde los $30.000 hasta los $65.000.
Ante este panorama, es necesario comprender que diversos factores inciden en el precio final del asado. Además del costo de la carne, intervienen aspectos como los gastos de producción, los insumos adicionales y los márgenes de beneficio de los establecimientos. Asimismo, la demanda y la oferta en el mercado también desempeñan un papel crucial en la determinación de los precios.
A pesar de los esfuerzos de los productores por mantener un precio asequible, el encarecimiento del asado ha generado preocupación entre los consumidores. En un intento por equilibrar la balanza entre calidad y costo, los negocios se enfrentan al desafío de brindar un producto apetitoso y tradicional, al tiempo que garantizan una opción accesible para los clientes.
Lo que más subió
Andrés, ha destacado que en la actualidad, lo más costoso del asado no es la carne en sí, sino los acompañamientos tradicionales que lo complementan, como las arepas, los insulsos y los envueltos. Explicó que, a medida que aumenta el costo de estos elementos, se enfrentan mayores desafíos para mantener un precio accesible para los consumidores.
Jiménez brindó un ejemplo ilustrativo: si se adquieren 100 libras de carne de cerdo a un valor de $11.000 pesos la libra, lo cual representa un total de $1.100.000, se destinarían $150.000 para la compra de los ingredientes del adobo.
Sin embargo, lo más costoso resulta ser la inversión en los acompañamientos. Para esas 100 libras de carne, que al ser preparadas se reducen a 65 libras, se requieren alrededor de $400.000 para adquirir las arepas, los insulsos y los envueltos necesarios.
El propietario de Doña Rosa resaltó que el aumento de precios se ha visto reflejado incluso en productos básicos como las arepas. Anteriormente, se solían comprar paquetes de arepas oreja e’ perro con siete unidades por un valor de $1.000 o $2.000 pesos, pero actualmente, esos mismos paquetes contienen solo cinco unidades y tienen un costo de alrededor de $4.000 pesos.
Este incremento en el costo de los acompañamientos ha generado preocupación tanto para los productores como para los consumidores. Los establecimientos de asado se esfuerzan por mantener una oferta atractiva y tradicional, pero los altos precios de los ingredientes adicionales plantean un desafío en términos de rentabilidad y accesibilidad para los clientes.
Indicador de abastecimiento
Según el último informe presentado por el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), el acopio de alimentos en los mercados mayoristas ha experimentado una disminución del 3,63%. Esta información se basa en datos recopilados por el Sistema de Información de Precios y Abastecimiento del Sector Agropecuario (SIPSA) durante las semanas del 1 al 7 y del 8 al 14 de junio de 2023.
En el caso específico de Surabastos, uno de los principales mercados mayoristas de la ciudad de Neiva, se registró una reducción del 15,17% en el abastecimiento. Esta disminución se atribuye principalmente a la categoría de «otros grupos», la cual experimentó una caída del 56,94% en su ingreso. Entre los alimentos que contribuyeron a esta disminución se encuentran el azúcar, las harinas y el maíz amarillo.
El informe del DANE también destaca que, durante las últimas dos semanas, se ha observado un ligero aumento en los precios del alimento para cerdos, tanto en el departamento del Huila como en todo el país. Además, se ha registrado un incremento del 5% en el precio del alimento balanceado a lo largo del año.
Sin embargo, no todo son malas noticias, ya que durante el mes de mayo se han empezado a observar disminuciones en el precio de algunos alimentos. Entre ellos se encuentran la papa criolla, las papas negras, el plátano, los huevos, el queso doble crema y el café molido, entre otros. Estas reducciones en los precios pueden representar un alivio para los consumidores y contribuir a una menor presión inflacionaria.
Es importante destacar que los cambios en los precios de los alimentos pueden estar influenciados por diversos factores, como la oferta y la demanda, los costos de producción y los cambios en las condiciones climáticas. Es necesario seguir monitoreando de cerca estos indicadores para comprender plenamente la situación del mercado y su impacto en los consumidores.