Bogotá reabrió las puertas de sus estadios este lunes a los hinchas de los clubes locales de fútbol, tras un mes de prohibición debido a actos de violencia entre barras en las tribunas que dejaron tres heridos.
Alrededor de 14.000 personas ingresaron al estadio El Campín para presenciar el partido entre Millonarios y Patriotas por la octava fecha del Clausura de la liga colombiana, informó el secretario de gobierno local, Luis Ernesto Gómez.
La alcaldía había suspendido el ingreso de hinchas el 4 de agosto, luego de que aficionados del Santa Fe y el Atlético Nacional de Medellín se pelearan en las gradas e invadieran el terreno de juego.
Al menos tres personas resultaron heridas en ese episodio, que opacó el primer encuentro con público en más de año y medio debido a la pandemia.
«¡Bienvenidos de nuevo al estadio El Campin! (…) ¡A gozarnos con toda y en paz la fiesta de fútbol!», escribió en Twitter la alcaldesa, Claudia López.
La decisión se tomó gracias a que los equipos y sus barras realizaron «un trabajo conjunto» para garantizar «la convivencia y la seguridad dentro y fuera del estadio», había informado la alcaldía previa al partido.
En tanto, las restricciones aún se mantienen para los hinchas visitantes, que no podrán ingresar a El Campín y el estadio de Techo en lo que resta de 2021.
Más de 600 personas, entre personal de logística y de seguridad, y unos 800 policías fueron desplegados para el evento. Además, los hinchas de las barras populares de Millonarios tuvieron que someterse a un reconocimiento facial electrónico para el ingreso, según la alcaldía.
Las principales ciudades colombianas han autorizado el regreso del público a eventos deportivos y culturales, cuando el país presenta una disminución de casos y muertes por covid-19 desde mediados de julio. Para ingresar a los estadios de la capital no hay restricciones de vacunación.
Colombia, con 50 millones de habitantes, es el cuarto país de América Latina con más muertos por covid-19 (más de 125.000) en proporción a su población (2.462 muertos por millón de personas), después de Perú, Brasil y Argentina.