La alta comisionada para los Derechos Humanos de la ONU, Michelle Bachelet, en su discurso ante el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas, aseguró que su oficina ha expresado “grave preocupación” por las acusaciones de serias violaciones de los derechos humanos por parte de las fuerzas de seguridad del Estado colombiano.
Destacó que desde el 28 de abril la mayoría de protestas han sido pacíficas pero se registraron algunos episodios de violencia, especialmente en Cali, por lo que animó al diálogo para resolver la crisis.
Bachelet entregó un balance en el que dice que su oficina ha registrado 56 muertes desde el inicio de las manifestaciones, incluyendo 54 civiles y dos policías, así como 49 posibles víctimas de violencia sexual. En ese sentido destacó el anunció del presidente Iván Duque de tener conversaciones y de investigar todas las denuncias.
Agregó que «la implementación en su totalidad del acuerdo de paz sigue siendo vital» para solucionar conflictos en Colombia y además para generar confianza en la población.
En su intervención, en general, la alta comisionada afirmó que se están presentando los mayores y más graves retrocesos de derechos humanos en el mundo que ha visto en su vida y señaló que para recuperarse de eso se necesita una visión conjunta con una acción concertada.