Según reporte de la Policía Nacional publicado se evidencia una reducción de criminalidad en Bogotá del 4,4 % en 2022; aunque en este mismo los datos dejan ver que mayo se convirtió en el mes más violento en lo que va del año.
Mayo reportó un total de 40.676 riñas, es decir, un promedio de 1.312 por día. En abril, el dato fue de 36.411 casos, en marzo se llegó a 35.680, febrero acumuló 30.949 y, finalmente, enero comenzó con 31.775. Por lo que este año se han contado cerca de 175.491 registros de riñas.
Ahora bien, las localidades que reportaron un mayor crecimiento son: Chapinero con 4.132 en mayo, duplicando el número del mes anterior, Teusaquillo creció de 2.669 casos a 3.335, y Santa Fe saltó de 3.593 a 4.026. Asimismo, Sumapaz entró a las localidades con reportes después de no tener ni uno en su lista. A las anteriores se les suman otras, que son las que comúnmente marcan más criminalidad, Suba, con 5.545 casos, Kennedy, que acumuló 5.291, y Bosa, que llegó a los 4.067 casos.
Estas cifras van de la mano con la percepción que tienen los habitantes de Bogotá que han señalado en múltiples encuestas que no se sienten seguros ni al interior de sus propios hogares. Algunos especialistas señalaron que esto se da debido a la intolerancia que se ha creado en la capital producto de muchos factores relacionados con el buen vivir y la convivencia.
Francisco Alvarado, experto en psicología social y comportamental de la Universidad Nacional, anotó que, “Algunas de las razones que detonan la intolerancia son: el estrés, la frustración y la impotencia, que disminuyen notablemente los niveles de tolerancia, la racionalidad y nos impiden comportamos más amablemente. Aunque en nuestra cultura la violencia siempre ha tenido esas características, puede ser que este incremento obedece más a una seguidilla de denuncias, lo que quiere decir que se han ampliado los canales y la gente siente más la presencia de las autoridades”.
Por tanto, desde la alcaldía han mencionado que las riñas en su mayoría aumentan en fechas de celebración cuando el consumo de alcohol es más alto, como en el día de la madre y del padre, día de amor y amistad y celebraciones de fin de año.