La decimoséptima etapa del Giro de Italia, entre Canazei y Sega di Ala, tendrá una longitud de 193 kilómetros, apta para el lucimiento de escaladores con un trayecto de alta montaña que rematará con una primera parte totalmente en bajada, luego una meseta ideal para sprint y un tramo final con dos puertos exigentes.
La parte de alta montaña desembocará en la cota de Sveseri (3a, 2,9 kms al 9,3) que inaugurará un descenso de más de 30 kilómetros, donde se pueden superar velocidades arriba de los 60 kilómetros por hora. La parte llana favorecerá a los velocistas, con una extensión de 48 kilómetros que concluirá en el denominado Passo San Valentino (1a, 14,8 km al 7,6), para luego favorecer a los escaladores con una subida exigente, que concluirá en otro descenso hasta un tramo llano que dejará al pelotón en la meta.
El colombiano, líder del Team Ineos, ha recuperado confianza con respecto al inicio de temporada en el que sentía que debía superar obstáculos mentales para retornar a la élite del ciclismo mundial.