Edna Yolima Calderón Ome
El café en Colombia no es simplemente una bebida; es una tradición arraigada en nuestro día a día. Según la firma Kantar, casi el 90% de los colombianos disfruta de una taza de café semanalmente. Este hábito no solo nos define como amantes del café, sino que también revela cómo esta bebida se integra en nuestra rutina diaria, desde la mañana hasta la noche.
El café colombiano no solo representa un gusto exquisito, sino que es una expresión de identidad nacional. En particular, el café del Huila, con sus notas dulces, acidez media-alta, fragancia aroma, frutal, notas a caramelo y un cuerpo redondo cremoso, balanceado y limpio, se destaca como una joya dentro de la diversidad de cafés que ofrece Colombia. Siendo el fruto del esfuerzo y la dedicación de nuestros caficultores, un patrimonio que merece ser valorado y celebrado.
Asimismo, en el país ha surgido un interés creciente por las marcas de café premium/excelso, estudios afirman que los consumidores colombianos muestran una disposición cada vez mayor para invertir en productos de alta calidad. De hecho, el mercado de café interno experimentó un impresionante crecimiento del 55% entre 2021 y 2022, indicó la Federación Nacional de Cafeteros de Colombia.
Es crucial comprender que cada taza de café colombiano, en especial el del Huila, representa un apoyo directo a nuestras comunidades cafeteras. Los beneficios económicos y sociales que brinda este respaldo son significativos. Al consumir café colombiano, contribuimos a mejorar las condiciones de vida de los caficultores y sus familias, fortaleciendo la economía local y preservando una tradición que nos enorgullece como país. Así, que en estas fechas navideñas, ¿qué mejor regalo que compartir la identidad de nuestro país a través de un producto tan emblemático como el café?
Es momento de apoyar a las mujeres caficultoras, comprar directamente a nuestros cafeteros y cooperativas, sin buscar reducciones en el precio. Podemos hacerlo a través de plataformas como www.comprocafedecolombia.com o en tiendas como Buen Café o Juan Valdez, reafirmando así nuestro compromiso con un país que respira y vive café.
El café colombiano no solo es una bebida, es un lazo que une nuestra identidad y nuestra historia. Es momento de valorarlo, promoverlo y disfrutarlo como un componente esencial de nuestra cultura. ¡Porque somos un país 100% cafetero, celebremos esta temporada compartiendo la riqueza de nuestro café del Huila! Regalemos no solo una taza de café, sino un verdadero testimonio de apoyo a nuestros caficultores y de amor por nuestro país.
