Por: Juan Carlos Ramón Rueda
“Vaca ladrona no olvida el portillo” decía mi abuelo Edolio entre sus muchos refranes, al referirse a alguien que reiterativamente hace las cosas mal. Eso está pasando con el déficit de tesorería en la alcaldía de Neiva. Además del decreto 016 de enero de 2021, este año firmaron los decretos 058 y 093. Sacan del presupuesto más de 3.500 millones destinados a cubrir el déficit y más de 4.300 millones que estaban destinados al Fondo de Contingencias Contractuales y Estabilidad Financiera y los llevan olímpicamente a otros rubros para contratar servicios y gastárselos en otras cosas, rayando en lo ilegal al cambiar la destinación de los recursos de un Fondo que tiene destinación específica. Adicionalmente, reitero que en el decreto 016 hacen algo insólito: Deciden de un plumazo que 3.800 millones de un ingreso ficticio que se lo inventaron porque no existe, se traslada a otras fuentes de ingreso y por arte de magia generará mayores ingresos en intereses financieros, entre otros, para luego llevarlo a rubros del gasto.
En la Secretaría de Hacienda se han dado a la tarea de esconder y minimizar el déficit de tesorería derivado de la voracidad del alcalde Gorky Muñoz, quien quiere hacer creer que la mejor manera de combatir el desempleo es contratando gente sin tener recursos de caja, sin tener en cuenta el PAC, sin verificar el recaudo, con el objetivo de cumplir sus compromisos pasados y futuros de campaña.
Yo notifiqué a las entidades encargadas del control. La doctora Elin Marcela Narváez Firigua en su condición de Contralora Municipal, me indicó en su respuesta que no es su función monitorear los diferentes medios de comunicación de la región, insinuando que no conocía mis denuncias sobre el déficit del municipio. Sobre mi denuncia dijo que esta fue enviada a la Dirección Técnica de Fiscalización para la auditoría programada en el PVCFT 2021. De otro lado, el doctor Alexander Bautista Mejia, Gerente Seccional VI de la Auditoria General de la República, entidad a la que le corresponde ejercer la vigilancia de la gestión fiscal de las Contraloría de Neiva, me indicó que verificaron que la Contraloría tiene programada su fase de inicio el primero de marzo del presente año y que esta termina en mayo, es decir, en dos meses aproximadamente.
No creo que pase nada. El saqueo sigue y la mayoría sigue como observadores en la plaza de toros. El problema es que no hay quien cierre el portillo y el toro que van a sacrificar saldrá tarde que temprano de nuestros propios bolsillos…
