Clamor en La Plata por el regreso de Ángela y Melanie. El pasado domingo, en su cuenta de X, el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos hizo un llamado para la liberación de Ángela Gómez, de 27 años, secuestrada el pasado 11 de septiembre. Su secuestro se suma a la desaparición de Melanie Cuchimba, de 13 años, quien habría sido reclutada por disidencias.
Diario del Huila, Panorama
Por: Gustavo Patiño
Clamor en La Plata por el regreso de Ángela y Melanie. Mediante su cuenta de X, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, solicitó la liberación de Ángela Valentina Gómez hace 27 días, en zona rural del municipio de La Plata, “Hace 25 días Ángela Valentina Gómez fue privada arbitrariamente de la libertad, en la Plata #Huila, por parte de un grupo armado no estatal. Llamamos a liberarla inmediatamente, sana y salva. Reiteramos a grupos armados no estatales su obligación de respetar a la población civil”, menciona el trino publicado el pasado fin de semana.
El pasado 11 de septiembre de 2024, Ángela Valentina Gómez fue secuestrada por un grupo armado mientras se desplazaba en su vehículo en la zona rural del sector Museñas, a tan solo cinco minutos del casco urbano de La Plata. La joven, conocida en el municipio por su trabajo como emprendedora y por su defensa de los derechos de los animales, fue interceptada por hombres armados cuando salía de una finca. Los secuestradores la obligaron a subir a su propio vehículo, un Kia Río de color blanco, y desde entonces su paradero es desconocido.
Pruebas de supervivencia
Según los primeros reportes, el grupo armado, identificado como el Frente Hernando González Acosta del Bloque Central Isaías Pardo, disidencia de las Farc, se comunicó con la familia de Ángela al día siguiente del secuestro, enviando pruebas de supervivencia y exigiendo una millonaria suma de dinero a cambio de su liberación. El modus operandi de estos secuestros, con fines extorsivos, se ha vuelto una práctica común en la región, según advirtió la Defensoría del Pueblo en una alerta temprana emitida para el municipio de La Plata.
El secuestro de Ángela Valentina no solo ha causado consternación en su familia, sino que ha dejado una profunda herida en toda la comunidad. La joven es muy querida en el municipio por su compromiso con las causas animalistas y su esfuerzo por desarrollar su propia empresa. “Ella es una inspiración para muchos de nosotros. Ver cómo ha trabajado para sacar adelante su emprendimiento es admirable”, expresó un amigo cercano de la familia.
Angustia y desesperación
La familia de Ángela vive momentos de angustia y desesperación. Desde el primer día del secuestro, los captores han enviado audios y videos en los que la joven aparece visiblemente afectada tanto física como psicológicamente. “El material que nos envían es cada vez más fuerte; esas personas han sido muy crueles en sus declaraciones”, comentó un familiar cercano, quien añadió que la situación ha sido traumática para todos. Además del sufrimiento emocional que implica el secuestro, la familia de Ángela ha recibido amenazas de los secuestradores. Estos han advertido que, si no se cumple con el pago exigido, atentarán contra ellos o secuestrarán a otro integrante de la familia.
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El caso de Ángela Valentina es el segundo secuestro que se registra en La Plata en lo que va del 2024. En febrero, Aura Embuz, madre del exsecretario de salud del municipio, fue secuestrada por dos hombres armados en la vereda El Retiro. Después de cuatro días en cautiverio, fue rescatada por las autoridades.
La desaparición de Melanie
El secuestro de la joven de 27 años se suma la desaparición de Melanie Cuchimba, una niña de 13 años, ocurrida el 6 de septiembre, apenas cinco días antes de la retención de Ángela Valentina. Melanie, estudiante de una institución educativa de la zona rural de La Plata, no ingresó a clases ese día, y sus pertenencias, entre ellas su bolso y su buso de deportes, fueron encontradas cerca del colegio.
El padre de Melanie, Miguel Cuchimba, recordó los últimos momentos antes de que su hija desapareciera. “Hablamos antes de que se fuera al colegio como lo hacía todos los días. Pero a eso de las once y media de la mañana, recibimos una llamada del rector diciendo que la niña no había ingresado a clases. Mi esposa fue al colegio y encontró su bolso y su buso tirados cerca del camino”, relató Cuchimba.
Poco después de la desaparición de Melanie, la familia comenzó a recibir mensajes y fotografías que indicaban que la niña habría sido reclutada por un grupo armado. “Nos enviaron fotos de la carretera que va al Cauca y algunos mensajes que decían que ya venían por ellas. Es desgarrador pensar que mi hija fue llevada por la fuerza a un lugar tan peligroso”, añadió Cuchimba.
Reclutamiento forzado
El caso de Melanie Cuchimba no es aislado. En los últimos meses, al menos cinco menores de la misma edad han desaparecido en las zonas rurales de La Plata bajo circunstancias similares. Según las autoridades, estos casos siguen un patrón que apunta al reclutamiento forzado por parte de grupos armados ilegales, quienes utilizan métodos de coacción y engaño para atraer a los jóvenes.
La Defensoría del Pueblo ha alertado repetidamente sobre esta situación, señalando que las disidencias de las Farc y otros grupos armados en el departamento del Cauca han intensificado sus esfuerzos para reclutar a menores de edad. A través de redes sociales como TikTok y Facebook, los reclutadores buscan establecer contacto con los jóvenes, prometiéndoles una vida de aventura y poder dentro de las filas de estos grupos ilegales. Sin embargo, la realidad que enfrentan es muy diferente.
Un desmovilizado de la estructura Carlos Patiño, activa en el departamento del Cauca, reveló que las disidencias de las Farc han estado utilizando las redes sociales para atraer a los jóvenes a sus filas. “Publican videos en TikTok y otras plataformas donde muestran a muchachos con armas largas, manejando camionetas, chicaneando. Eso es lo que les venden a los muchachos, pero la realidad es otra, especialmente para las mujeres”, explicó el excombatiente.
El desmovilizado añadió que los jóvenes reclutados, especialmente las mujeres, son sometidos a condiciones inhumanas. “A las mujeres las obligan a satisfacer sexualmente a los comandantes, y si se niegan, las llevan a las zonas más peligrosas del conflicto. Muchos de ellos no sobreviven”, afirmó.
Gran preocupación
Esta práctica ha causado una gran preocupación entre las autoridades y las organizaciones defensoras de derechos humanos. Quienes han pedido una intervención urgente por parte del gobierno nacional y las entidades competentes. La vulnerabilidad de los menores de edad en las zonas rurales de Huila y Cauca es alarmante. Y el reclutamiento forzado amenaza con desintegrar el tejido social de estas comunidades.
La desaparición de Melanie y el secuestro de Ángela Valentina han generado una ola de solidaridad en La Plata. Familiares, amigos y vecinos han organizado velatones, marchas y encuentros comunitarios para exigir la liberación de Ángela y el retorno de Melanie. “Solo pedimos que nos las devuelvan, que las dejen regresar a salvo. No podemos seguir viviendo con este miedo”, expresó uno de los participantes en una de las manifestaciones.
Las autoridades locales, por su parte, continúan con las investigaciones. Y han intensificado los operativos en la región para dar con el paradero de Ángela y Melanie. Sin embargo, hasta el momento, no han revelado más detalles sobre el avance de las operaciones de rescate.
Mientras tanto, la comunidad de La Plata sigue esperando, con la esperanza de que estos trágicos sucesos lleguen a un final pacífico. La angustia de los familiares de Ángela Valentina Gómez y Melanie Cuchimba se convierte en un grito de auxilio. Para todas las víctimas de la violencia en esta región. Donde los grupos armados ilegales han instaurado un régimen de terror.
