Al borde de quedar totalmente incomunicadas, con el casco urbano, se encuentran más de 25 veredas de la zona rural del municipio de Colombia, debido a las fuertes lluvias de los últimos días del mes de octubre pasado, aunque el invierno ha cedido en las últimas 48 horas, el temor es que de acuerdo con los pronósticos del Ideam, las lluvias van a seguir arreciando hasta el mes de diciembre por lo que la situación y el estado de las vías puede llegar a empeorar.
Los habitantes del municipio de Colombia en el Huila, en especial en la zona rural de esta localidad, piden intervención del gobierno del Huila, para que les ayude a superar la emergencia vial, generada por la ola invernal.
Son 25 veredas pertenecientes a las inspecciones de; San marcos, Santa Ana, Alto san Antonio, donde se presenta casi pérdida total de la banca en varios pasos en el sitio conocido como La Palma, allí los conductores se arriesgan a pasar en sus vehículos.
Otra situación que se dio a conocer es el taponamiento por deslizamiento en el sitio conocido el volador, claman y piden que haya una solución a través de una pronta intervención de parte de la gobernación del departamento.
El problema en terreno
“Nada genera más angustia al campesino colombiano que el invierno, es algo que cada poco de tiempo, se convierte en una realidad constante para quienes vivimos al Norte del Huila, Santa Ana Huila, es”, dijo Paula Perafán, sostuvo además que son víctimas de la indiferencia por parte de los gobernantes o quienes tienen a cargo la solución a sus problemas.
Esta profesional, preocupada por la situación que tienen que vivir, en especial con la ola invernal que afectan las vías de acceso, las mismas que tienen fallas en verano, con la llegada del invierno se convierten en verdaderas trampas mortales para los que debe entrar o salir hacia la zona rural.
“Las vías de acceso en pésimo estado que generalmente siempre lo están y con el invierno son totalmente intransitables, no permiten que, en caso de unas emergencias, se pueda sacar un enfermo, una embarazada y menos para entrar víveres”, relató.
Paula argumentó que el arreglo que se hizo hace algunos días, en el paso seguido del puente El Pitayo que une la Vereda la Unión y Santa Ana ya está casi que, dañado nuevamente, se hizo un muro para contener el agua de la creciente del rio Cabrera, “del muro ya no queda mucho, esto por ser arreglos temporales”, agregó.
Para complementar se refirió a las vías que los comunican con el departamento del Tolima, sobre el tema argumentó; “ni hablar de las vías por el Tolima para llegar a Dolores, son igualmente intransitables”.
“Estamos cansados de que nos den contentillo con mediocridad, esto no es un juego es una urgencia y una necesidad de toda una comunidad. Es demasiado triste ver como una región que provee tanto comercio tanto al departamento del Huila como del departamento del Tolima es tan olvidada en absolutamente todo el sentido de la palabra».
Finalmente dijo: “a los Entes correspondientes se les hace un llamado urgente de atención, esto es un callejón entre la supervivencia y el peligro… al que muchos debemos enfrentarnos para subsistir y subsanar nuestras necesidades. Lanzamos un S.O.S por la zona norte del Huila”, culminó.
Otras opiniones
“Ya casi se acaban de ir río abajo los más de 400 millones que según dicen, fueron invertidos en ese trabajo. La solución es hacer los gaviones para el desvío del río, pero creo que no se harán porque esa va a ser la mina de oro de aquí en adelante”, sostuvo Patricia Parga, también residente en la zona.
Jairo Triviño, transportador se atrevió a manifestar la odisea que se convierte atreverse a transitar por esta vía en tiempo de invierno.
«El terreno es muy inestable es básicamente barro o greda, que se compacta en verano y se convierte en una especie de barrizal en invierno con los peligros que se derivan de esa inestabilidad”, a veces se pregunta uno cómo logró pasar y sigue con vida, concluyó
Giovanny Gamboa otro profesional doblemente colombiano, contó que son cerca de 25 veredas de las casi 60 que tiene el municipio de Colombia en su zona rural, “esto habla de la dimensión de la situación que afecta a quienes tienen la necesidad de desplazarse hacia el municipio o a otros sectores, no pueden sacar sus productos y mucho menos atender una cita o emergencia médica o pensar en viajar para abastecerse de lo básico ”, sostuvo.
Este corredor vial hace parte del proyecto que durante tantos años han esperado no solo los habitantes de Colombia en el Huila, sino otros municipios de la zona norte del departamento y algunos del sur del Tolima. “Es una salida que comunicaría a esta inmensa región con la Llanura colombiana. La obra está en marcha ya vienen trabajando desde el oriente, mientras que aquí se sigue presentando demora por la inestabilidad del terreno a lo que se suma ahora la ola invernal que incrementa las dificultades”, concluyó.
Posibles soluciones
Diario del Huila, en el interés de conocer respuestas para los doblemente colombianos, sobre este tema de nunca acabar que se recuerda cuando llega el invierno o cuando hay un accidente o una emergencia por la creciente del río Cabrera.
Ante la ausencia de la secretaría de Vías e Infraestructura, se nos comunicó que se está coordinando para poder enviar el personal y la maquinaria para atender la emergencia vial, que es recurrente en el sector.
“Es una afectación de río Cabrera sobre la banca de la vía que de Colombia conduce a Santa Ana ubicado sobre el sector Las Palmas, donde se perdió la banca por socavación del río”, se indicó desde la secretaría.
Sobre la emergencia generada por la pérdida de la banca también se indicó qué conocimiento se tiene sobre el particular;
“Eso sucedió el día de ayer, la entidad se encuentra planeando la logística para atender de manera prioritaria y solucionar el tránsito vehículos que se encuentra suspendido. El problema que se tiene en el momento son las fuertes lluvias que impiden atender de manera inmediata la reparación del tramo vial”, manifestó el vocero.
