DIARIO DEL HUILA, PANORAMA
Según cifras registradas por el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar en el país para el año inmediatamente anterior más de 800 menores de edad han sufrido de explotación sexual.
Hoy se conmemora el Día Internacional contra la Explotación Sexual y Comercial de Niñas, Niños y Adolescentes y Colombia no es ajeno a esta problemática, pues según las cifras registradas por el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar en el país, más de 800 niños y niñas han atravesado por este fatídico hecho que atenta contra su humanidad, sus derechos y su ser.
Aunque actualmente no hay cifras registradas de este flagelo a la fecha, los hechos en torno a esta problemática se hacen evidentes a través de denuncias públicas que hacen las personas que han afrontado este incidente social que lastimosamente deja como principales víctimas a menores de edad.
Recopilando cifras de los años anteriores, Policía de Infancia y Adolescencia registró que para el 2020 se han logrado evidenciar más de 897 víctimas menores de edad que han sufrido alguna forma de explotación sexual comercial.
Uno de los casos que más se han registrado son los de pornografía infantil con 551 casos denunciados ante las autoridades en 2021. Asimismo, se registraron 1.500 casos similares en 2019 y 2020.
De acuerdo con el ICBF a nivel nacional el 42 % de los menores de 18 años han sufrido algún tipo de vulneración en sus derechos “o física, sicológica o sexualmente”, y que incluso cerca del 70 % de estas violaciones acontecen en el mismo hogar. Por ello, resulta clave poder establecer medidas protectoras en los espacios donde estos conviven.
El trabajo colectivo entre las familias y la articulación entre instituciones debe ser el arma para poder frenar este fenómeno que ha dejado no solo afectaciones físicas sino también sociales, emocionales, mentales, educativas etc.
Explotación sexual
Cuando se habla de explotación sexual esta hace referencia a la utilización de un menor de 18 años para cualquier fin de satisfacción sexual. Es importante aclarar que no es necesario acceder al menor físicamente para cometer el delito, basta con que esté al otro lado de la pantalla de un computador o celular para que cuente como abuso.
La creciente interconectividad a través de Internet y el acceso a toda clase de dispositivos electrónicos ha facilitado la comisión de este delito.
Una de las manifestaciones más preocupantes de este crimen es la transmisión en vivo de abuso sexual de menores de edad.
Un panorama que sigue siendo evidente es que Los abusadores usualmente son personas cercanas a los menores, pues aprovechan la familiaridad para intimidarlos. Pero hay que dejar claro algo porque el explotador no solo es quien abusa del menor, sino también las personas que están detrás de la pantalla y consumen o pagan por ver la transmisión del crimen. Este es un delito transnacional.
Este delito tiene una base económica en donde quedan en medio personas inocentes que, en medio de la situación terminan afectadas y llevando la parte más fuerte; la agresión.
Normalmente, los agresores que consumen este tipo de contenidos en los que abusan de los menores, son hombres de edad madura y residentes en países de altos ingresos como Australia, Estados Unidos e Inglaterra. Además, realizan los pagos a través de empresas de transferencias de envíos.
Necesidad de una ley
A principios de julio del 2021 entró en vigor la pena de cadena perpetua a violadores y asesinos de niños en Colombia. La llamada Ley Gilma Jiménez, sancionada por el expresidente Duque, la cual reglamentó la prisión perpetua revisable y representó también una reforma del Código Penal, y los Procedimientos Penales y Carcelarios. Si bien el mandatario la norma no llevará a que esta clase de delitos cesen, sí representará drásticas sanciones para que “a los violadores les caiga todo el peso de la ley”.
