Luis Humberto Tovar Trujillo
Nunca había conocido en mi vida, las declaraciones, del rancio más fino, entendida esta expresión como, “Un producto rancio, de mal aroma, desagradable”.
Podríamos incluir las recientes declaraciones de la vicepresidente, de mal gusto, desagradables y asquientas, que para nada coinciden en términos literales con su nombre. Mucho pesar por la Francia gloriosa, de Europa.
Cualquier persona decente, con un mínimo de ilustración, se preocuparía, al menos, por honrar su nombre de pila, (no de alberca), en el actuar de su vida digna, y hacer realce de esa coincidencia, para hacer de la vicepresidencia, la cuna de la ilustración en Colombia y ante el mundo.
Los derechos humanos reivindicados por Francia, hoy ejemplo en el mundo, valen tres tiras de queso, como se dice popularmente, por culpa de su ignorancia supina; eso ni siquiera le valió, para honrar al pais que lleva su nombre.
Pero no es así; Colombia avanza en el viacrucis, (término para la época litúrgica, a la que entramos), de la destrucción, y la anarquía, ausencia total de libertad y orden, hoy llamada a ser reivindicada, desde nuestro escudo, símbolo patrio.
Utilizar la condición de negro, para reivindicar esclavitudes del pasado, aun con algunos rezagos, no es suficiente razón, para utilizar expresiones, que, antes que reconquistar nuevos escenarios de libertad, conducen, desde la tribuna vicepresidencial, a renovar resentimientos, ruindades, bajezas, ya desechados por la postmodernidad.
Tratar como “DE MALAS” al resto de la sociedad, la gran mayoría de los colombianos, por hacer “uso indebido y abusivo” de un helicóptero para sus apetencias resentidas, extravagancias humillantes, que solo conducen a la indignidad de la raza que representa.
Muchas, han sido las expresiones de rechazo, hasta indicar que ella no representa la raza negra; los negros cada día son mas elocuentes, como el anterior ministro de medio ambiente, hoy representante de su gobierno en EE.UU.
Estar negros en las alturas intelectuales de nuestra sociedad, es la mejor y mayor expresión de la desaparición, y muy avanzada por cierto de esa supuesta desigualdad, solo existente en la mente desafortunada de una ignorante, desequilibrada y resentida, hoy vergüenza ante el mundo.
Esta bien que exista la lucha contra el racismo, como otras muchas luchas, como contra su gobierno, pero contra la ineptitud, la falta de orden y libertad, lucha esta que no existe en la posibilidad vicepresidencial, porque solo les interesa la anarquía, y la ausencia de autoridad, por esa “coincidencia “feliz” con el delito, esa “pertenencia feliz” con el lodo, donde con astucia se revuelcan.
Supérate mientras dejas de existir. Se perdió el ministerio de la igual, no lo conoce ni por el forro. Siento lastima por los resentidos. Pero por su incapacidad para conocer la posibilidad de la ilustración.
