La tensión se incrementa en la capital huilense luego de que un nuevo atentado con explosivos, se presentara esta noche de jueves en la zona industrial de la ciudad.
Según informes preliminares, un individuo a bordo de una motocicleta arrojó lo que parece ser una granada de fragmentación hacia las instalaciones de Distoyota, una reconocida distribuidora de vehículos.
El ataque, ocurrido hace unos momentos, afectó a dos automóviles que se encontraban estacionados en el lugar, incluyendo un vehículo con insignias de la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Afortunadamente, no se reportan heridos hasta el momento.
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Este incidente se suma a la reciente amenaza vivida en InciHuila, donde otro artefacto explosivo, también una granada, fue lanzado sin detonar. Estos eventos, parecen tener relación con la presión ejercida por grupos al margen de la ley para el cobro de extorsiones, comúnmente conocidas como «vacunas».
Además, en Algeciras, Huila, el pasado martes se registró un incidente similar, donde una granada fue lanzada hacia una casa de apuestas, sin causar daños personales. Estos acontecimientos mantienen en alerta a las autoridades locales y a la comunidad en general, quienes exigen medidas contundentes para garantizar la seguridad en la región.
Las investigaciones están en curso para identificar a los responsables de estos actos violentos y prevenir futuros ataques que pongan en riesgo la vida e integridad de los ciudadanos.
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