Las eliminatorias sudamericanas son reconocidas como las más desafiantes del mundo debido a las diversas condiciones climáticas y geográficas que presentan los países. Bolivia, por ejemplo, juega en El Alto, a más de 4.000 metros sobre el nivel del mar. Sin embargo, la sede de Colombia también ha sido objeto de críticas, especialmente por el horario del partido contra Argentina, programado para el 10 de septiembre a las 3:30 p.m. en Barranquilla, donde las altas temperaturas y la humedad son factores determinantes.
El primero en manifestar su inconformidad fue el entrenador de Perú, Jorge Fossati, quien cuestionó las condiciones en las que Colombia organiza sus partidos como local. Durante una rueda de prensa, Fossati insinuó que la Federación Colombiana de Fútbol buscaba sacar ventajas más allá del terreno deportivo. «Yo no ando buscando ventajitas, ni que voy a jugar a una hora inapropiada en el medio del calor», expresó el técnico uruguayo.
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Lionel Scaloni, entrenador de Argentina, también expresó su preocupación. Si bien reconoció la fortaleza de la selección colombiana, afirmó que el horario del partido no era el más adecuado. “Es un partido en un horario que no tendría que ser, pero es lo que hay. Vamos a jugar en esas condiciones y haremos lo mejor, sabiendo que Colombia es un gran equipo”, declaró Scaloni.
El calor y la humedad de Barranquilla son aspectos que han sido analizados desde un punto de vista fisiológico. Henry León, médico fisiólogo y Doctor en Biociencias de la Universidad de La Sabana, explicó que jugar a las 3:30 p.m. en esas condiciones genera un desgaste físico considerable para los futbolistas. «El sol, la cancha probablemente mojada y la falta de corrientes de aire generan un impacto fuerte, provocando deshidratación y fatiga, lo que incrementa el riesgo de lesiones», afirmó León.
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Sin embargo, León también destacó que la selección colombiana ya está acostumbrada a estas condiciones, lo que representa una ventaja frente a equipos que no están adaptados a este tipo de clima. “Es una estrategia que requiere adaptación, y Colombia ya tiene experiencia jugando en estas condiciones, lo que podría darle una ventaja frente a otros equipos”.
A pesar de las críticas, el especialista subrayó que tanto Colombia como Argentina deben prepararse adecuadamente para afrontar el desgaste físico, lo que incluye una correcta hidratación antes y durante el partido. “Es clave garantizar el consumo de electrolitos para evitar complicaciones como calambres o deshidratación severa”, explicó.