La sana intencionalidad del gobierno nacional para apoyar económicamente a los propietarios de motos y vehículos públicos, a través de la disminución del costo en un 50% del Soat, se ha convertido en un verdadero dolor de cabeza para las empresas aseguradoras por el aumento del número de accidentes durante los primeros ocho meses del año y por la creciente evasión de este documento en las motos. Además, por la profunda crisis económica y social que atraviesa el país, por la aplicación incoherente de los instrumentos de la política económica del gobierno nacional, se han venido disminuyendo progresivamente las ventas de vehículos y de estos velocípedos. El gremio transportador apoyó la iniciativa, pero ahora se sabe que fue una equivocación que se tiene que resolver. No hay que dar tantas vueltas para confirmar que, lamentablemente, la estrategia no dio resultados, por lo menos no los esperados. Antes de la medida la evasión del SOAT para las motos era del 62,5 %, con corte a agosto de 2023 la cifra es de 78 %. Para el caso de los demás vehículos, en el mismo periodo, la evasión pasó de 30,4 % a 35 %.
Todos sabemos que el seguro, que cubre los gastos inmediatos en atención en salud y servicios funerarios de los siniestros viales: Se pensó como un esquema solidario, pero se ha visto lastrado por el fraude, la evasión y el aumento en la siniestralidad. Sobre este último punto, la preocupación también recae en las motos (argumento que usa Fasecolda para proponer que se les cobre más). En 2022, seis de cada 10 fallecidos por siniestros viales fueron motociclistas, según los datos de la Agencia Nacional de Seguridad Vial. Este no es un dato menor: el año pasado 4.914 usuarios de motos murieron en las vías del país. Pese a las altas cifras de siniestros viales, estos vehículos siguen ganando popularidad: el número de matrículas de motocicletas nuevas en el país fue casi tres veces mayor que el de otras clases de vehículos en 2022. Este año, han decaído estos indicadores.
Por este motivo, el SOAT volvió al paredón porque Fasecolda propuso que este seguro sea más caro para las motos y dijo que el Gobierno cometió un error al bajar la tarifa para estos vehículos en diciembre de 2022. En las vías del departamento del Huila, se pueden observar la cantidad de motos sin placas, y sin los documentos exigidos por el Código Nacional de Tránsito, parqueados antes y después de los retenes que realizan las autoridades para detectar los evasores. Es risible, porque eluden los controles policiales. Por tal motivo, se deben crear estrategias para controlar estas evasiones que atentan contra la seguridad vial y la vida de los peatones y pasajeros de los vehículos que transitan diariamente por las vías.