El suministro de combustible para aviones en varias ciudades de Colombia enfrenta una crisis sin precedentes, afectando a aeropuertos clave como los de Valledupar, Cúcuta y Leticia a partir del 25 de agosto de 2024.
DIARIO DEL HUILA, ACTUALIDAD
La Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) encendió las alarmas en Colombia al comunicar su preocupación sobre la inminente escasez de combustible para aviones, una situación que afectará directamente a varias ciudades del país. Entre las localidades impactadas se encuentran Valledupar, Cúcuta y Leticia, donde no habrá suministro de combustible a partir de esta fecha, según confirmó la Empresa Colombiana de Petróleos (Ecopetrol).
La IATA advirtió que la racionalización del combustible, medida anunciada por Ecopetrol, aunque necesaria, no será suficiente para evitar una crisis en el transporte aéreo. Según la asociación, las aerolíneas cumplen con estrictas regulaciones de seguridad que les impiden operar con menos combustible del requerido, lo que complicará aún más la situación.
Regulaciones estrictas y seguridad aérea
El reglamento de combustible en Colombia exige que las aeronaves cuenten con una cantidad mínima de combustible a bordo para garantizar la seguridad de los vuelos. Esto incluye no solo el consumo necesario para el trayecto de origen a destino, sino también el combustible requerido para posibles desvíos a aeropuertos alternos y tiempos de vuelo adicionales. Estos requisitos son especialmente críticos en vuelos internacionales, donde las distancias y las variables operativas son mayores.
La IATA subrayó que la planificación de combustible para cada vuelo se realiza cumpliendo con estas regulaciones, y reducir estos mínimos no es una opción viable para las aerolíneas, lo que podría llevar a la cancelación de vuelos en caso de que el suministro no se normalice.
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Impacto en aeropuertos clave
La falta de combustible afectará a múltiples aeropuertos en Colombia, con suspensiones y alertas críticas que comienzan el 25 de agosto y se extienden hasta el 26 de agosto en algunos casos. Las ciudades más afectadas incluyen:
– Valledupar, Cúcuta y Leticia: Terpel, el principal proveedor de combustible en estas ciudades, anunció la suspensión total del suministro a partir del 25 de agosto de 2024.
– Bogotá y Cartagena: También enfrentarán suspensiones significativas, con Terpel anunciando la falta de suministro total a varias aerolíneas a partir del 26 de agosto.
– Medellín, Bucaramanga, Cali y Pasto: Se encuentran en alerta por inventarios críticos, lo que podría llevar a suspensiones de vuelos.
– Barranquilla: Alertas de inventarios críticos y suspensiones programadas para algunas aerolíneas desde el 26 de agosto.
Respuesta de la presidencia
Ante la creciente preocupación, el presidente Gustavo Petro recurrió a sus redes sociales para desestimar la crisis de abastecimiento de combustible para aviones, asegurando que la situación está bajo control y que no se trata de una emergencia de gran magnitud. Sin embargo, el presidente no proporcionó detalles sobre las medidas específicas que se están implementando para mitigar el impacto en los viajeros y las aerolíneas.
La situación se originó a partir de un fallo electrónico en la Refinería de Cartagena el 16 de agosto, lo que provocó una reducción en la producción de combustible del 8%, más tarde ajustada al 5%. Esta disminución fue suficiente para que la IATA emitiera un comunicado alertando sobre la posible crisis, generando inquietud entre las aerolíneas y los pasajeros.
Acciones de Ecopetrol
En respuesta a la crisis, Ecopetrol emitió un comunicado asegurando que la operación en la refinería ha sido restablecida y que la empresa ha implementado un plan exhaustivo para garantizar el suministro continuo de combustibles, incluyendo gasolina, diésel y jet fuel. Además, la compañía anunció la importación de 100,000 barriles de combustible para aviones, con el fin de cubrir la demanda inmediata y evitar un colapso en el transporte aéreo.
A pesar de estas medidas, la incertidumbre persiste, y las aerolíneas han comenzado a preparar planes de contingencia, que podrían incluir la reubicación de pasajeros en otros vuelos, reembolsos y la provisión de servicios adicionales durante posibles demoras.
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