Es octubre de 2018 me encuentro realizando consulta en una de las clínicas de la ciudad, la mayoría de mis pacientes siempre son mayores de 50 años, por eso me causa mucha curiosidad cuando veo en el listado de espera pacientes menores e incluso jóvenes de 20 a 30 años. Uno de ellos asistió ese día, salí a la puerta del consultorio y lo llamé por su nombre, era un joven de 18 años que venía acompañado por un adulto, tenía su cara cubierta por un tapabocas (aún no estábamos en la pandemia) y eso me sorprendió aún más, ya imaginaba que era un problema grave.
Iniciamos el interrogatorio y él no hablaba, contestaba su acompañante, el joven solo miraba con temor y tristeza, una mirada que reflejaba humildad y mucho sufrimiento. Traté de hacerlo sentir confianza hablándole directo a él y mirándolo a los ojos, diciéndole que ahí estaba para poder ayudarlo. Su acompañante me respondió que tenía un tumor y que desde hacía 8 meses evolucionaba, que había iniciado muy pequeño en la encía y había progresado de forma rápida, con múltiples consultas y una larga espera para por fin poder llegar a mi valoración. No tenía ningún antecedente de importancia, ni tampoco consumo de alcohol o cigarrillo. Lo pasé a la camilla para examinarlo, le pedí que se quitara el tapabocas, descubrí un inmenso tumor que deformaba todo el lado derecho de la cara, un gran tumor que provenía de la cavidad oral y afectaba toda la mejilla, el piso de la boca, la mandíbula del lado derecho y la parte central, ya le habían realizado una biopsia que mostraba el diagnóstico de carcinoma escamocelular.
El carcinoma oral de células escamosas es la neoplasia maligna más común de origen epitelial en la cavidad oral, suele afectar en su mayoría a hombres mayores de 40 años. Los sitios de localización más frecuentes son la lengua y el piso de la boca. La etiología es multifactorial, siendo el tabaco y el alcohol los factores de riesgo más importantes. La presentación clínica es variable y, aunque es precedido por cambios visibles en la mucosa oral, el diagnóstico suele realizarse de forma tardía. Un diagnóstico precoz es de importancia crítica para mejorar la sobrevida y los resultados del tratamiento. El tamizaje del cáncer de cavidad oral es efectivo al reducir la mortalidad y morbilidad.
Terminamos el examen y de revisar las imágenes, una tomografía que mostraba que estaba comprometida toda la mandíbula del lado derecho desde la articulación temporo-mandibular, por lo que se requería una prótesis especial y además de realizar una reconstrucción.
Continuaremos la próxima semana.