A medida que la mano de obra agrícola en Colombia envejece, surgen nuevas iniciativas para revitalizar el sector rural. En medio de esta transformación, Rosa Angélica Navarro, una joven caficultora de 30 años, destaca como un ejemplo inspirador de cómo la nueva generación está no solo continuando con la tradición cafetera.
DIARIO DE HUILA, ACTUALIDAD
El envejecimiento de la mano de obra agrícola en Colombia es una realidad alarmante. Más del 45% de los caficultores del país tienen más de 60 años, según datos de la Supersolidaria, lo que refleja una necesidad urgente de revitalizar el sector rural. Para abordar este desafío, tanto el sector público como el privado están implementando programas diseñados para atraer y retener a los jóvenes en las zonas rurales.
Un ejemplo destacado de esta nueva ola de caficultores jóvenes es Rosa Angélica Navarro, una mujer de 30 años que no solo continúa con la tradición cafetera familiar que ha pasado por tres generaciones, sino que también está desafiando las normas culturales que históricamente han relegado a la mujer en el campo.
Innovación y apoyo para los jóvenes agricultores
Rosa Angélica ha sido recientemente galardonada por Nestlé a través de su marca Nescafé en el concurso “La Década del Millón”. Originalmente destinado a premiar la fidelidad de los clientes, el concurso se ha reorientado para apoyar a los productores agrícolas. Gracias a esta nueva versión del concurso, Rosa Angélica recibirá apoyo económico y asistencia técnica para potenciar su emprendimiento.
Como parte del premio, tendrá la oportunidad de recibir mentorías especializadas y participar en eventos internacionales como el 9° Encuentro de Jóvenes de la Alianza del Pacífico en Chile. Este evento le permitirá conectar con grandes empresas del sector y explorar nuevas oportunidades para expandir su negocio. Además, jóvenes caficultores de Antioquia y Risaralda también fueron
Empoderando a la mujer en el sector agrícola
El enfoque de Rosa Angélica en empoderar a las mujeres campesinas fue un factor crucial para su selección. Además de su proyecto principal, «Arbustos de mi cafetal», que se centra en la producción y comercialización de café tostado de especialidad, Rosa Angélica ha lanzado «Elibella», un emprendimiento dedicado a la producción de la vara de floración de la orquídea Phalaenopsis. Este proyecto combina la conservación ambiental con el desarrollo rural, lo que lo convierte en un modelo inspirador.
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Rosa Angélica afirma que su objetivo es claro: “Queremos demostrarle a la mujer caficultora que puede ser independiente, liderar y generar ingresos sin tener que abandonar su comunidad ni su familia. Es un mensaje poderoso, especialmente para las nuevas generaciones”.
Un ejemplo para las futuras generaciones
A través de su trabajo y dedicación, Rosa Angélica no solo está construyendo un negocio exitoso, sino también sirviendo de ejemplo para las nuevas generaciones. Sus hijas, de 4 y 6 años, ven en ella una inspiración y un modelo a seguir, mostrando que es posible construir un proyecto de vida en el campo sin depender de un hombre. “Para mí, esa es la mayor recompensa”, asegura Rosa Angélica con orgullo.
La historia de Rosa Angélica Navarro es un claro ejemplo de cómo el compromiso y la innovación pueden transformar el sector agrícola en Colombia, ofreciendo un rayo de esperanza en medio de los desafíos que enfrenta el campo.
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