Marcha del silencio
Por: Margarita Suárez
Excelente la marcha del silencio convocada por los gremios de la producción del Huila y los comerciantes, para rechazar los bloqueos de las vías, situación que tanto daño está causando a la economía local. La gente que crea empresa y genera empleo, se puso la camiseta blanca para decir “Basta Ya, Sí a la Movilidad”. Es una voz de alerta lanzada por los sectores que sostienen la economía en la región. La situación de las 85 mil familias cafeteras del Huila es angustiosa. Están Ad portas de recoger una cosecha para la cual no consiguen recolectores y no pueden transportar el grano para comercializarlo. Los perjuicios a los piscicultores son de marca mayor. Algunos para poder alimentar sus peces y cumplir los compromisos de mercados nacionales e internacionales, que tanto trabajo les ha costado construir, han tenido que llevar la comida por trochas “como si estuviéramos contrabandeando”, dijo uno de los afectados. Y ni hablar de los ganaderos que han visto paralizadas las campañas de vacunación y no tienen forma de transportar semovientes. Al clamor se unieron muchas familias preocupadas por el desabastecimiento que condujo al alto costo de los alimentos. También hizo presencia el gobernador del Huila, la alcaldía de Neiva y nuestro jefe eclesiástico Monseñor Froilán Casas, quien bendijo el acto. Al concluirlo pronunció una bella oración como colofón a la concurrida marcha que salió del Centro de Convenciones y terminó en el Parque Santander. Trajes y banderas blancas fueron el símbolo de la marcha que contó con el apoyo total del presidente de la Cámara de Comercio del Huila, Ariel Rincón Machado. Su equipo de colaboradores fue fundamental para el éxito del acontecimiento que unió a los huilenses por encima de afectos o desafectos políticos. Importante la presencia de los transportadores con Coomotor a la cabeza y la Terminal de Transportes de Neiva, que tiene una gerente valiente, a quien no le ha temblado la voz para ir a hablar con los organizadores del paro en busca de soluciones. Mi admiración a cada uno de los ciudadanos que tuvieron el valor de salir a la calle a clamar por nuestra libre movilidad. Esta marcha nos recordó que los derechos de los unos terminan donde comienzan los de los demás.
