| HAROLD SALAMANCA |
Hoy celebramos el tercer aniversario de un compromiso global que trasciende fronteras y abraza la causa de eliminar el cáncer de cuello uterino. En 2020, la Organización Mundial de la Salud (OMS) lanzó una estrategia histórica, unificando a 194 países, incluido Colombia, en la lucha contra este cáncer prevenible. Este día, el Día Global de Acciones para la Eliminación del Cáncer Cervicouterino, no solo conmemora nuestro acuerdo colectivo sino que también nos llama a la acción, recordándonos que todos tenemos un papel vital que desempeñar.
¿Por qué se conmemora este día a nivel global? Porque por primera vez en la historia, países de todo el mundo se unieron para eliminar el único cáncer prevenible, el de cuello uterino. La OMS trazó un camino claro: vacunar contra el Virus del Papiloma Humano (VPH) a niñas y adolescentes, tamizar con pruebas altamente efectivas ADV VPH a mujeres y tratar oportunamente a aquellas diagnosticadas con este cáncer.
La esencia de esta declaración global se traduce en acciones concretas. Cada país, cada comunidad y cada individuo tiene un papel crucial en este esfuerzo conjunto. La prevención es la clave, y todos podemos contribuir. Vacunar a nuestras hijas contra el VPH, informar a las mujeres de nuestro entorno sobre la prueba ADN VPH y su derecho a acceder a ella, son pasos fundamentales. Estas acciones no solo están alineadas con los objetivos estratégicos de la Fundación SalBo, sino que son esenciales para crear conciencia profunda y generalizada sobre la importancia de proteger la vida de las mujeres.
En la Fundación Salamanca Borrero – SalBo, creemos en la fuerza de la acción local para tener un impacto global. Este día no solo es una celebración de nuestros logros, sino también un recordatorio de que debemos redoblar nuestros esfuerzos. La eliminación del cáncer de cuello uterino no es un sueño inalcanzable; es una realidad que podemos forjar con nuestras acciones colectivas.
Cada uno de nosotros tiene la capacidad de contribuir a este cambio significativo. A través de la vacunación, la difusión de información y la promoción de la prueba ADN VPH, podemos marcar la diferencia. Recordemos que la salud y el bienestar de nuestras mujeres están en riesgo, y es nuestra responsabilidad colectiva protegerlas.
En este tercer aniversario, reafirmemos nuestro compromiso y trabajemos incansablemente hasta que el cáncer de cuello uterino sea una preocupación del pasado. ¡Unámonos y eliminemos juntos el cáncer de cuello uterino!
