El plan ‘Habilidades para la Vida’, se está adelantando en las Instituciones Educativas, con el fin de disminuir las tasas de autoeliminación o intentos. Les enseñan a resolver conflictos, a debatir, convivencia social, fortalecer el pensamiento crítico. Disminuyen casos de autoeliminación en el Huila.
A propósito de la conmemoración del Día Mundial para la Prevención del Suicidio, el pasado 10 de septiembre, el reporte en Colombia es preocupante. El Instituto Nacional de Medicina Legal informó que, de los 1540 reportes a junio de 2023, 1201 son hombres y 339 fueron mujeres quienes fallecieron, lo que equivale a un aumento del 14,58% más de registros, comparados con el mismo periodo de 2022.
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En el departamento
Ante esta problemática, Cesar Alberto Polania, secretario de Salud del Huila, expresó: “en el año 2021, debido a la pandemia del Covid-19, hubo un aumento de los casos de suicidios, 96 en total, a causa de pérdidas familiares, la misma enfermedad, dificultades económicas”.
Desde la entidad, se encuentran trabajando en la reducción de los casos en el marco de la implementación de la política pública de salud mental y reducción del consumo de sustancias psicoactivas.
Este es un problema multicausal, hay dificultades sociales, económicas, violencia de género, depresión, situaciones mentales. Todos estos factores de riesgo, se tienen que intervenir, a través de estrategias articuladas intersectoriales.
“En el 2022, disminuyó la tasa de autoeliminación, tuvimos 7 casos por cada 100.000. En el 2023, hay una reducción de los casos de suicidio, tenemos tres situaciones por cada 100.000. Hubo 32 casos, certificados por Medicina Legal”, agregó el secretario de Salud.
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Es un trabajo intersectorial
“Constantemente se viene convocando a todos los actores sociales, comunitarios e institucionales a trabajar de manera articulada por la salud mental, el Gobierno Departamental lo ha proyectado así, y ha estructurado todas las acciones en torno a una Política Pública que no solo compromete el sector salud, sino también a educación, gobierno, a la Secretaría de la Mujer, al Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, a los entes de control para que podamos impactar las problemáticas de salud mental. La incidencia de suicidio obviamente el escenario es que debemos seguir trabajando por la prevención del suicidio el tema y atacar los problemas de riesgo que lo producen” destacó César Alberto Polanía.
Jhon Bohórquez, Médico Psiquiatra, fundamentado en evidencia científica, expuso que los factores de mayor incidencia en la conducta suicida de las personas están relacionados con los determinantes sociales de la salud mental, específicamente en niños, niñas y adolescentes. “Factores como la pobreza, la seguridad alimentaria, la exposición a violencias interpersonales, las dificultades en jóvenes para la vinculación laboral, para la vinculación educativa, aspectos relacionados con el género facilitan el padecimiento de trastornos mentales”, indicó.
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Autoeliminación en jóvenes
Los problemas y trastornos mentales en los niños y adolescentes se pueden manifestar en el comportamiento, como fugas del entorno escolar, fugas de la casa, el consumo de sustancias psicoactivas o a través de conductas delictivas como el hurto.
“Es muy frecuente que en el entorno escolar se presenten estas manifestaciones comportamentales, por ello, desde el enfoque de Derechos Humanos es importante reconocer que los niños, niñas y adolescentes tienen derecho a la educación independientemente de su condición, incluso si presenta algún tipo de discapacidad psicosocial” señaló Bohórquez.
Al desescolarizar un niño, no solamente se está vulnerando el derecho a la educación, sino que también se aumenta el riesgo en salud mental. El colegio, la escuela son entornos fundamentales para la sociedad, no solo por el aprendizaje académico, sino también por ser el espacio de socialización que contribuye a la protección de la salud mental.
La pandemia por causa de la COVID-19 impactó en gran medida la salud mental de los niños, niñas y adolescentes en Colombia, aseguró el Defensor del Pueblo, Carlos Camargo, luego de revisar los casos de suicidio en menores de edad entre 2015 y 2022.
“Esta es una realidad que aumenta de manera preocupante y por eso desde Alianza por la Niñez Colombiana, World Visión Colombia, y la Defensoría del Pueblo hacemos un llamado a tomar acciones para trabajar en su prevención, fortalecer entornos protectores y fomentar el desarrollo de habilidades en los cuidadores para detectar problemas de comportamiento y, con apoyo psicosocial, hacer que los conflictos no terminen de manera fatal”, dijo el Defensor del Pueblo.
En este sentido, la Procuraduría General de la Nación alertó sobre el alarmante incremento de trastornos mentales y alteraciones en la salud mental de niños, niñas, adolescentes y jóvenes en el país, quienes cada vez más presentan síntomas de depresión, ansiedad y trastornos de comportamiento; factores que a su vez influyen el consumo de sustancias psicoactivas, deserción escolar, intentos de suicidio y casos de suicidio consumado en el país.
Según el Ministerio Público, en el primer semestre de 2023, fueron reportados 1.540 suicidios, de los cuales 479 fueron en jóvenes, 142 en adolescentes y 1 en infancia, En el año 2022, Colombia reportó en total 2.835 suicidios, de los cuales, 936 correspondieron a jóvenes, 312 a adolescentes y 3 a infancia.
El reporte señaló que, que las edades con mayor índice de problemas en salud mental son los jóvenes de 17 a 24 años, seguido por los adolescentes de 12 a 16 años y la población infantil de 6 a 11 años. Así mismo, el informe determinó que por riesgos concluyentes como las violencias de todo tipo en especial la intrafamiliar; el acoso escolar, el consumo de sustancias psicoactivas; ciber acoso; el reclutamiento por parte de grupos armados, entre otros, juegan un factor importante frente a la ideación y conducta suicida en estos ciclos de vida.
Las evidencias recolectadas por el ente de control también concluyeron que, el acceso a servicios en términos de capacidad instalada y oportunidad de atención, la falta de talento humano experto en los territorios, y el estigma que se presenta para acudir a un servicio especializado de salud mental, son las mayores barreras evidenciadas en los territorios, sumado a que el abordaje desde el entorno familiar, es insuficiente o nulo e hizo un llamado al sector salud, para que las consultas de psicología y psiquiatría, sean priorizadas, sin que se requiera pasar primero por una consulta con médico general.
Así mismo, exhortó a los entes territoriales, especialmente a las secretarías de salud y educación, con el fin de que revisen la asignación de recursos que han dispuesto para cumplir con las acciones planeadas orientadas a la prevención y atención en salud mental, el fortalecimiento familiar y la promoción de la convivencia escolar, buscando tener impacto en todos los contextos y entornos protectores en los que se desenvuelven estas poblaciones.