Mashiramo, símbolo de conservación y ecoturismo comunitario en Huila, lidera desde 2002 un modelo de conservación en Huila, promoviendo el ecoturismo y la participación comunitaria para proteger la biodiversidad.
DIARIO DEL HUILA, REGIONAL
La Corporación de Monitoreo de la Biodiversidad del Sur, conocida como Mashiramo, se ha convertido en un modelo de conservación y desarrollo sostenible en el departamento de Huila. Surgida en 2002 como parte del programa *Corredor Biológico Guácharos Puracé*, esta organización se extiende en municipios como Pitalito, San Agustín, Acevedo y Palestina, y tiene como misión preservar la biodiversidad de la región y promover el uso sostenible de los recursos naturales, involucrando a la comunidad local en cada uno de sus proyectos de investigación y desarrollo ambiental.
Desde sus inicios, Mashiramo ha contado con la participación activa de campesinos, ex cazadores, jóvenes, estudiantes y profesionales, quienes trabajan en conjunto para proteger el entorno natural y fomentar una relación respetuosa con la fauna y flora local. Rosalino Ortiz Fernández, socio fundador y guía turístico de la corporación, relata la historia del nombre *Mashiramo*, que significa “oso andino” en lengua yutpa. Este nombre fue inspirado por un oso de anteojos que apareció en la vereda El Pensil, en Pitalito, lo que marcó el inicio de un proceso de intercambio de conocimientos entre la comunidad y las instituciones de conservación. A lo largo del tiempo, el oso se convirtió en símbolo de la organización y en un recordatorio de la importancia de proteger la vida silvestre.
Conservación, educación y desarrollo sostenible
Mashiramo tiene como principal objetivo la conservación de la biodiversidad a través de la investigación sostenible y el fortalecimiento de la economía local. La organización ofrece talleres y capacitaciones en ecoturismo, senderismo y manejo de recursos naturales, incentivando la sostenibilidad en la región y promoviendo la protección de especies en peligro. Sus programas incluyen monitoreos y estudios que ayudan a comprender la fauna y flora locales, permitiendo a los habitantes integrarse en actividades sostenibles que les generen ingresos mientras preservan el medio ambiente. Estos proyectos no solo generan un impacto positivo en el ecosistema, sino que también educan y empoderan a la comunidad, quienes se convierten en actores activos de la conservación.
Un aspecto importante de la labor de Mashiramo es su capacidad de trabajar en red con otras organizaciones e instituciones. Desde el inicio, la corporación ha colaborado con entidades como Parques Nacionales, la Corporación Autónoma del Alto Magdalena (CAM), y ONG internacionales. Estas alianzas han permitido que Mashiramo acceda a recursos y conocimiento técnico, potenciando su impacto y facilitando el desarrollo de proyectos de mayor alcance. Así, la organización ha consolidado su presencia en la región y ha obtenido reconocimiento en diversos espacios de conservación y ecoturismo.
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Uno de los proyectos más destacados de Mashiramo es el *Pasadía del Paso del Oso*, un programa de ecoturismo comunitario en Pitalito que involucra a propietarios de reservas naturales, transportadores y habitantes locales en una experiencia de turismo rural. Con el respaldo de diferentes familias y el apoyo de voluntarios, este programa permite a los visitantes adentrarse en la historia de vida de la comunidad y apreciar la riqueza natural de la región, fortaleciendo la economía local y creando una conciencia ambiental que resguarda el territorio y sus recursos. Los participantes no solo descubren los paisajes del Huila, sino que también conocen de cerca el esfuerzo de la comunidad por proteger su biodiversidad, lo que genera un intercambio cultural valioso y contribuye a una mayor apreciación del entorno natural.
Investigación y protección de especies en peligro
La labor de Mashiramo también se centra en la investigación de especies amenazadas y el monitoreo de la fauna y flora local. La región cuenta con una rica biodiversidad, que incluye una gran variedad de aves, mamíferos y plantas únicas de la zona andina. Mediante estudios y monitoreos periódicos, la organización ha logrado documentar el estado de diferentes especies y su distribución, información que resulta clave para implementar acciones de conservación adecuadas. Este trabajo no solo beneficia la biodiversidad local, sino que también fortalece la identidad y el sentido de pertenencia de la comunidad hacia su entorno natural.
Además de su enfoque en el ecoturismo, Mashiramo ha buscado la diversificación económica de la región. Al promover el turismo sostenible, la organización ofrece una alternativa económica para las comunidades que dependen tradicionalmente de la agricultura y la ganadería, actividades que en muchas ocasiones pueden tener un impacto negativo en el medio ambiente. A través de capacitaciones y talleres, Mashiramo educa a los habitantes locales en prácticas sostenibles y los anima a integrar el ecoturismo en sus actividades diarias, generando ingresos adicionales y reduciendo la presión sobre los recursos naturales.
Un esfuerzo colectivo que marca la diferencia
La Corporación Mashiramo es un ejemplo de cómo el esfuerzo conjunto de la comunidad puede generar grandes beneficios para el medio ambiente y la sociedad. Con más de dos décadas de trabajo, Mashiramo sigue promoviendo la conservación, la educación ambiental y el ecoturismo como herramientas esenciales para un futuro sostenible. La organización se ha mantenido fiel a sus principios de proteger y preservar la biodiversidad, al tiempo que contribuye al bienestar de las comunidades que habitan en esta región del Huila.
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