Tras la confirmación de que Kim Jong-un posee un nuevo misil intercontinental, EE. UU., Japón y Corea del Sur realizarán pruebas militares
Por: Angélica Andrade
Tras la advertencia sobre maniobras entre los tres poderosos países, el mundo presume un adelanto en las negociaciones entre Tokio y Seúl, que conservan un altercado histórico acerca de la política esclavista japonesa contra la comunidad surcoreana en el marco de la Segunda Guerra Mundial.
Los tres países han pactado realizar pruebas militares de defensa antimisiles y antisubmarina de forma regular, para hacerle frente a la “creciente amenaza” del régimen de Corea del Norte durante sus convenios de alto nivel en Washington, que se llevaron a cabo lasemana anterior, según ha informado el Ministerio de Defensa de Corea del Sur.
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La alianza se logró después de las pruebas de armas de Kim Jong Un que incluyen el misil balístico intercontinental Hwasongpo 18, que emplea combustible sólido y del que su lanzamiento ha sido rechazado por los tres países mancomunados. Pues el viernes anterior, las Fuerzas Armadas de los Estados Unidos y Corea del Sur iniciaron el desarrollo de una serie de “maniobras militares conjuntas” que involucran la utilización de “cazas y bombardeos” como respuesta al lanzamiento.
Tanto Estados Unidos, como Japón y Corea del Sur han analizado acerca de la continuación de programas de entrenamiento de índole trilateral, entre los que se encuentran las operaciones de interceptación marítima y contra la piratería, de acuerdo con lo indicado por la agencia de noticias surcoreana Yonhap.
Es de resaltar que Japón y Corea del Sur mejoraron en sus relaciones bilaterales durante el pasado mes de marzo tras un convenio para agilizar y ahondar el “intercambio de inteligencia militar”como estrategia de protección añadida frente a los tanteos balísticos de Corea del Norte.
