POR: Jorge Eliseo Cabrera Caicedo
Definitivamente la campaña de Gustavo Petro se derrumbó por completo ante un inesperado competidor para la segunda vuelta presidencial. En efecto, toda la estrategia estaba montada sobre la base de que el contendor fuera “Fico Gutiérrez”. Le enfilaron los ataques a esa candidatura con el argumento de que era el candidato del Presidente Duque y del expresidente Álvaro Uribe Vélez y como consecuencia, sería el candidato del “continuismo”, al contrario del “cambio” que decían significaba la candidatura de Gustavo Petro.
Pero resulta que el país le creyó más al cambio que propuso Rodolfo Hernández, quien enfocó el grueso de su campaña en la propuesta de lucha contra la corrupción, dado el desprestigio generalizado de los congresistas y de los partidos políticos. Otro punto fundamental fue la austeridad en el gasto público.
Pues bien, su propuesta caló hondamente entre los colombianos, a tal punto que su votación le permitió pasar a la segunda vuelta presidencial y estar a un paso de ganar la presidencia de la república, hasta el punto de haber obligado a Gustavo Petro, ante la inminencia de la derrota, a proponerle al Ingeniero Hernández un “acuerdo nacional”, cualquiera que fuera el resultado final de la elección. Sin embargo, el candidato Hernández ya había anticipado que su gobierno necesitaría a Gustavo Petro como jefe de la oposición como lo contempla la democracia.
Los ataques rabiosos de Petro al ingeniero, estamos seguros, no alterarán los resultados electorales del 19 de junio, cuando ya existe tranquilidad y confianza sobre el futuro del país en las manos del desabrochado santanderiano. Después del resultado del 29 de mayo, se recuperó la bolsa, el dólar ha bajado y reina el optimismo nacional. Cesó la angustia.
Los sondeos sobre la intención de voto en la segunda vuelta presidencial han confirmado ya una significativa ventaja (ocho puntos) del ingeniero Hernández, la cual seguirá consolidándose día tras día.
Nos preocupa sí alguna acción desesperada del candidato Petro para tratar de alterar el normal desarrollo del nuevo certamen electoral. No nos extrañaría su ya conocido proceder narcisista, lleno de odio y de violencia.
ADENDUM- Muy loable y patriota la actitud de Federico Gutiérrez y Rodrigo Lara Sánchez al anunciar, la misma noche del 29 de mayo, su apoyo al ingeniero Hernández, colocando así el interés nacional por encima de cualquier consideración personal, e invitando a sus seguidores (más de cinco millones) a igual proceder.
