La jornada de Reforma Agraria ‘Narciso Beleño’, que se vivió este sábado, entregó cerca de 6.000 hectáreas de tierra a familias rurales de once municipios del país y 163 títulos de formalización de la propiedad rural. San Jacinto (Bolívar), Montería y Chinú (Córdoba), Caucasia (Antioquia), Corinto y Popayán (Cauca), Puerto Lleras (Meta), Pailitas y San Alberto (Cesar), San Sebastián de Buenavista (Magdalena) y Pitalito (Huila) fueron los puntos en los que más de 1.500 familias recibieron una nueva oportunidad con la entrega y formalización de suelos fértiles.
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La maratón, que se llevó a cabo en simultáneo desde las diferentes regiones del país, fue liderada por la ministra de Agricultura y Desarrollo Rural, Jhenifer Mojica, y el director de la Agencia Nacional de Tierras, Felipe Harman, junto a otras entidades del Sistema Nacional de Reforma Agraria.
La jornada toma su nombre en reconocimiento al líder campesino asesinado en Santa Rosa del Sur (Bolívar), el pasado 21 de abril. Es un homenaje a líderes y lideresas asesinadas en su lucha por la tierra y el bienestar de sus comunidades.
«Hoy hay aquí una muestra de lo que es la Reforma Agraria. Hoy, más de 1.500 personas, familias, reciben una segunda oportunidad de vida, porque la Reforma Agraria no es solo comprar las tierras. Claramente es nuestro compromiso, y es el compromiso ineludible del presidente Gustavo Petro, su legado más importante”, aseguró desde Montería la ministra de Agricultura y Desarrollo Rural, Jhenifer Mojica.
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“En el camino, muchos han quedado atrás y los hemos perdido. En el camino, muchos líderes fueron perseguidos y enviados al exilio. Mientras que quienes los desplazaron compartían con el gobierno en ese momento. Claro que tiene la urgencia Colombia de hacer la Reforma Agraria, porque es justicia. La Reforma Agraria es darle la oportunidad a la segunda o tercera generación de las ocho millones de familias desplazadas que lo perdieron todo. Por eso, la Reforma Agraria es imparable, porque Colombia no puede seguir gestando una nueva ciudadanía si no reparamos el pasado”, enfatizó la ministra.