DIARIO DEL HUILA, REGIONAL
Por: Brayan Smith Sánchez
La Oficina de Gestión del Riesgo del departamento reporta afectaciones por cuenta de la ola invernal en los municipios de Algeciras, Garzón, La Argentina, La Plata, Neiva, Palermo, Pitalito, San Agustín, Santa María y Tello. Hasta la fecha no se han reportado pérdidas de vidas humanas, pero si en infraestructura
En el Huila siguen las afectaciones por la ola invernal, donde hay 12 municipios que presentan alguna eventualidad de afectaciones que son Algeciras, Garzón, La Argentina, La Plata, Neiva, Palermo, Pitalito, San Agustín, Santa María y Tello, que ha alertado a las autoridades competentes y a los consejos de gestión del riesgo de cada municipio.
A la fecha no se han reportado pérdidas de vidas humanas, pero si afectaciones en infraestructura. Solo en Tello se ha notificado a la Oficina de Gestión del Riesgo departamental de 1.900 familias damnificadas que no cuentan con servicio de agua potable debido al daño de la bocatoma en la jurisdicción, siete viviendas destruidas, alrededor de 20 veredas incomunicadas y afectaciones, especialmente en cultivos de café, banano y plátano.
En la región se han presentado alrededor de 11 emergencias, más de 11 viviendas averiadas, cinco vías afectadas principalmente por el desbordamiento de ríos y quebradas, así como derrumbes, daños en un puente vehicular, puentes peatonales, un acueducto y una institución educativa.
En el municipio de Santa María, debido a las últimas precipitaciones que se han presentado, los habitantes del centro poblado de San Joaquín están a punto de quedarse incomunicados, debido a que el río que cruza por esta zona ha deteriorado la banca de la vía, y deja a los pobladores con la incertidumbre, por lo que pueda pasar con la carretera.
“Se han afectado diferentes sitios del municipio, han sido torrenciales de agua, lo que ha causado que las vías se dañen, los cultivos de café, granadillas y caña, se han visto maltrechos por los derrumbes. Fincas con cultivos de café y fríjol, también han resultado afectadas”, sostuvo Liborio Cabrera, habitante de Santa María.
En el municipio de Yaguará el Consejo de Gestión del Riesgo está en alerta por las veredas como La Floresta, ubicada en un área inclinada lo cual genera desprendimiento del suelo y rocas. Además, está rodeada por los ríos Pedernal y Yaguará presentando una problemática compleja porque pueden estar arrasando con los cultivos de esta región, y presentar socavación de las piedras colindantes de los ríos.
Las veredas El Jagual, Bajo Mirador y Vilú, poseen un riesgo de inundación por estar cerca de la represa de Betania y pueden afectar los cultivos y actividades que los campesinos realizan en esta temporada. Por otra parte, Arenoso está en la lista, debido a que sus terrenos están inclinados y se pueden presentar muchos deslizamientos de tierra.
En Neiva
En Neiva, las fuertes lluvias que se presentaron en la madrugada de ayer hicieron que varias vías se inundaran, entre ellas la avenida ‘Inés García de Durán’ y la avenida Circunvalar, que generaron congestiones vehiculares, por lo que las autoridades correspondientes hicieron un llamado a la comunidad para que no arrojen basuras, porque esto también contribuye a que colapsen o se tapen las alcantarillas. La zona más afectada es la vía que de Vegalarga conduce a la zona urbana de la capital huilense.
Hasta el momento no se han reportado evacuaciones. La Oficina de Gestión del Riesgo está encargada de realizar el monitoreo del río Las Ceibas, mediante la Red de Monitoreo Hidrometeorológico de Alerta y Alarma Automatizada en la Cuenca del Río Las Ceibas (Rimac), de la Corporación Autónoma Regional del Alto Magdalena, Cam, lo que permite un conocimiento previo de esta fuente hídrica.
“Al momento de presentar un aumento de su cauce, tomar las medidas necesarias en las comunidades aguas abajo, y así realizar la evacuación al momento de necesitar tomar dicha medida, en otras fuentes se realiza un monitoreo con las comunidades que viven en su cuenca, mediante la comunicación permanente con líderes comunitarios y así tomar las decisiones correspondientes en pro de salvaguardar”, dijo Armando Cabrera, coordinador de Gestión del Riesgo de Neiva.
Por último, manifestó que las zonas más vulnerables a cualquier eventualidad son las que están habitadas por comunidades aledañas al afluente de un río o en una parte de posibles deslizamientos.
“Las zonas de mayor riesgo en la ciudad de Neiva, son los asentamientos ubicados en los cauces de las diferentes fuentes hídricas que pasan por la ciudad, como el río las Ceibas, río del Oro, quebrada La Torcaza, entre otras. Otras zonas de riesgo son las viviendas ubicadas en las laderas que presentan deslizamientos”, expresó Cabrera.