La increíble historia de supervivencia de los cuatro valientes niños indígenas que sobrevivieron a un accidente aéreo y pasaron 40 días solos en la densa selva del Guaviare ha capturado la atención de Colombia y el mundo. Sin embargo, detrás de este relato de resiliencia y coraje, han surgido acusaciones de maltrato intrafamiliar y abuso sexual contra el padre de los menores, Manuel Miller Ranoque.
El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), según el Tiempo, ha informado que está llevando a cabo la verificación sobre las denuncias presentadas contra el padre de los niños. Estas denuncias están siendo analizadas por un defensor de familia designado para el caso, quien ha mantenido la información en reserva para proteger los derechos de los niños.
Según un artículo publicado por el El Tiempo, la familia materna de los pequeños afirma que la madre de los niños había presentado denuncias previas contra Manuel Miller Ranoque. Según esta versión, el padre biológico del bebé de un año y del niño de cuatro años, y padrastro de las otras dos niñas de 9 y 13 años, habría cometido maltrato intrafamiliar y abuso sexual.
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En respuesta a estas acusaciones, Manuel Miller Ranoque ha negado categóricamente cualquier responsabilidad en una entrevista para El Tiempo. El padre de los niños asegura que la familia materna busca obtener la custodia de los menores con el fin de obtener beneficios económicos y crear conflictos. «Ellos quieren llevarse a los niños para obtener recursos y causar problemas. Eso es lo único que saben hacer«, afirmó.
Por otro lado, desde su ingreso al Hospital, el ICBF dispuso de un equipo de Defensoría de Familia asignada para comunidades indígenas.
El ICBF y delegados de la OPIAC adelantan una mesa de coordinación con autoridades tradicionales indígenas que apoya la toma de decisiones de la Defensoría de Familia étnica en pro del restablecimiento de derechos de las niñas y el niño.
