Dos menores experimentaron incidentes aislados en los que les tocaron los genitales; en el primer caso, el inquilino de la madre de la víctima del asentamiento Brisas del Venado fue responsable, y en el segundo caso, un familiar involucrado. Ambos casos fueron denunciados a la policía. víctima al corregimiento El Caguán, donde también le dio besos.
Un incidente tuvo lugar en la comuna de Nueve e involucró a una niña de nueve años que fue objeto de un comportamiento extraño cometido por el inquilino cuya casa había alquilado su madre.
El hecho ocurrió en el asentamiento Brisas del Venado, según información puesta a disposición de la Policía Nacional, justo cuando la joven llegaba de clases en su escuela primaria. Al parecer la menor entró en su habitación y luego la llamó el hombre al que su madre le había alquilado una habitación.
Mientras estaba sola en su casa, esta persona supuestamente la besó y tocó sus zonas íntimas. La niña aterrorizada huyó a la casa de su abuela en busca de seguridad e informó a sus padres de inmediato. Cabe señalar que el pervertido también le habría pedido a la chica que mantuviera la boca cerrada frente a todos.
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En un segundo hecho de abuso sexual, la víctima fue un adolescente de 14 años de edad del corregimiento El Caguán de Neiva. La joven habría aceptado una invitación para ver el circo en la zona sur de la capital del Huila de parte de un adulto cercano a su familia.
Un poco después de las 10:00 p.m., el espectáculo terminó. El hombre no la llevó de regreso a su casa; en cambio, aprovechó la confianza que tenían en él para llevarla a un bar para que lo acompañara mientras él disfrutaba de unas cervezas.
Allí, se dice que la persona la acosó y tocó partes de ella que le habías prohibido tocar. La joven también fue besada por este hombre, por lo que al enterarse su madre acudió a la policía e interpuso la denuncia correspondiente.
Tal como lo establece el artículo 209 del Código Penal colombiano, quienes cometen el delito de practicar actos sexuales con menores de catorce años son susceptibles de enfrentar consecuencias legales.
La Policía Metropolitana de Neiva continúa realizando operativos dirigidos a la protección de la niñez y la adolescencia, por lo que invita a la ciudadanía a denunciar cualquier vulneración a los derechos de los niños, niñas y adolescentes a través de las líneas 123 de la Policía y 141 del ICBF.
En un esfuerzo por recordar a los padres que la seguridad comienza en el hogar, las autoridades los instan a enfatizar la comunicación regular con sus hijos para evitar rápidamente situaciones que puedan comprometer su integridad.