La sociedad colombiana no sale del asombro por la escalada alcista de todos los bienes y servicios a partir del pasado 1 de enero, por el incremento que tuvo el salario mínimo mensual en 12%, provocado porque los precios de algunos bienes, se encuentran indexados a este indicador económico. La sociedad colombiana está viviendo un panorama preocupante porque el incremento que presentan algunos servicios empezó después de las celebraciones de fin de año, pero que los demás bienes han mantenido esa tendencia alcista sin tener un soporte real que lo amerite. Este fenómeno tiene un nombre en el vocablo de las familias colombianas: la cuesta de enero. Se experimenta anualmente, independientemente de la situación económica del país, y como resultado, las finanzas personales de cada persona se ven un poco ajustadas. El desbordamiento de los gastos realizados durante la temporada navideña, empiezan a pasar factura a los bolsillos de los consumidores.
Llegan también un tsunami de subidas de precios, tarifas y tasas que diezman los exiguos ingresos de las familias colombianas, que vienen desde el año anterior por el incremento de la gasolina que, desde el mes de octubre de 2022, se ha incrementado en $6.010 el galón de gasolina, lo cual ha afectado seriamente el consumo y por ende la demanda interna de la economía colombiana. Igualmente, los peajes subieron un 13,2%, conforme al IPC obtenido en el 2022. El costo de la adquisición de los pasaportes aumentó $15.000. El aumento del arriendo mensual de los bienes inmuebles presentará un incremento de acuerdo con la cifra de la inflación anual de la vigencia 2023 que profiera el Dane el próximo martes 9 de enero, junto a las cuotas copagos a la salud y los servicios públicos afectan el bienestar de los hogares.
El transporte público, se convierte en otro elemento distorsionante en la escalada alcista que está incidiendo en la rentabilidad de sus propietarios. Este sector ha sido crudamente afectado por el aumento de los combustibles, inseguridad, impuestos y repuestos. A grito tendido, los transportadores le han solicitado de manera reiterada a los alcaldes municipales que les autoricen un reajuste a las tarifas de este transporte. Igualmente, los precios de los alimentos se encuentran desbordados en los centros de distribución y mercadeo, así el organismo estadístico diga lo contrario. Las amas de casa cuando van a hacer el mercado, los precios de los alimentos se encuentran por las nubes.
La economía global está bajo ataque de una inflación indómita y un ritmo inusual en la subida de las tasas de interés, situaciones nocivas para la recuperación de los países. Colombia no es ajena a este fenómeno económico. Aunque el Banco de la República ha bajado levemente estas tasas, el crédito bancario se encuentra muy costoso para el sector productivo del país.
