Familia denuncia presunto caso de discriminación escolar

Familia de un menor con discapacidades múltiples dio a conocer a través de Diario del Huila la aparente vulneración de sus derechos a la inclusión y a recibir educación. 

DIARIO DEL HUILA, NEIVA

Por: Angélica Andrade Quimbaya

Como un presunto asunto de discriminación y vulneración al derecho que tienen los niños, las niñas y los jóvenes para acceder a educación de calidad, fue descrito el caso del menor de siete años, Juan Daniel Barona Noreña, quien tiene discapacidades múltiples y, de acuerdo con su progenitora, ha sido víctima de matoneo escolar por parte de integrantes de la Institución Educativa Misael Pastrana Borrero de la ciudad de Neiva, donde mantiene matrícula activa.

Al respecto, la mamá del menor, Sandra Janeth Noreña, asegura que el niño no está recibiendo educación completa y el buen trato que se merecen todas las personas, como se dispone en el en el artículo 26 de la Declaración Universal de los Derechos del Hombre: “Toda persona tiene derecho a la educación. La educación tiene que ser gratuita, al menos en lo referente a la enseñanza elemental y fundamental” y en el artículo 67 de la Constitución Política de Colombia donde se reza que el Estado debe garantizar las libertades de enseñanza, aprendizaje, investigación y cátedra, puesto que, “La educación es un derecho de la persona y un servicio público que tiene una función social; con ella se busca el acceso al conocimiento, a la ciencia, a la técnica, y a los demás bienes y valores de la cultura”.

En coherencia, Karen Lesmes, profesora que viene apoyando el proceso de Juan Daniel, declaró: “Se ha vulnerado el derecho a una educación inclusiva, pertinente y de calidad por parte de la Secretaría de Educación y de los directivos de la Institución Educativa Misael Pastrana Borrero. En el año 2022, el niño ingresó a esta institución, donde pese a que la mamá informó sobre el caso, no tomaron las medidas pertinentes para garantizar un enfoque diferencial dentro del proceso educativo”.

Situación

Por su parte, Sandra Janeth Noreña, mamá de Juan Daniel Barona Noreña quien, según su diagnóstico clínico, presenta discapacidad múltiple que incluye autismo y retraso del desarrollo psicomotor, narró las situaciones por las que ha pasado el menor, asegurando que él empezó a llegar a la casa con los cuadernos en blanco y a referir que su profesora le decía que es el malo de la clase, razón por la que, como mamá y cuidadora, fue citada por los docentes de la institución para notificarle que, entre todos los padres de familia, habían recolectado firmas con las que solicitaron formalmente que el niño no regresara a clase porque aparentemente interrumpía la formación e interfería con el desarrollo de los temas.

“La profesora Yolanda del Misael Pastrana lo discriminó desde que el niño ingresó trasladado desde la Normal Superior y lo matriculé allá porque me quedaba cerca a la casa, puesto que ya estaba sin empleo porque necesito estar con él para cuidarlo. En ese momento, recién el niño había ingresado al colegio, al niño le cerraron la puerta en la cara y mi mamá que estaba ahí salió llorando de la impotencia al ver la situación. Yo fui desde el principio al colegio para dar a conocer la situación y en una ocasión, la profesora quizá me lo trató de loco y lo sacó del aula por lo que el niño estuvo por fuera durante aproximadamente una hora solo, convirtiéndose en un riesgo porque no había vigilante ni nada y qué tal el niño se hubiera salido. El niño está en las condiciones para recibir más de dos horas de clase, de hecho, el profesor Eder con el que está ahora ha hecho que el proceso educativo esté mejorando, él me incluye al niño en las actividades y lo trata bien, precisamente mi niño va a participar en un acto cultural que van a hacer en izada de bandera; tanto está de bien que todas las noches él reza por la profesora Karen, el doctor Andrés, los profesores de fútbol que fueron los que le enseñaron a caminar y el profesor actual con quien está contento y quiere estar más horas en el colegio.

Las entidades no me han escuchado, para lo del PIAR llevaron el año pasado a una psicóloga que ni es experta en este tipo de procesos y lo único que me dijo fue que leyera el final donde decía que lo iban a poner a leer imágenes. Siempre que iba, la profesora me decía que Juan era rebelde y antes a él me le pegan, no es agresivo, sí tiene discapacidad pero no es agresivo”, detalló Sandra Noreña.   

Según profesionales de la fundación que viene apoyando el proceso jurídico que interpuso Noreña, es clara la evidente vulneración del derecho a la educación, ya que el estudiante debe contar con un docente de apoyo y con un Plan Individual de Ajustes Razonables, PIAR, que, básicamente contiene la metodología para la intervención pedagógica anual que se desarrollará con y para el estudiante Juan Daniel, especificando las herramientas de evaluación y técnicas de enseñanza que se desarrollarían: “Nos dimos cuenta que él estaba siendo atendido en el aula como cualquier niño que no tiene ningún tipo de discapacidad, debido a esto presentamos acción de tutela”, mencionó Karen Lesmes.

Luego de la presentación de acción de tutela, el Juzgado Primero de Infancia y Adolescencia procedió en contra, razón por la que la familia, con la ayuda de la fundación continuó el proceso de apelación que llevó a determinar en fallo de segunda instancia, emitido por la magistrada ponente

Luz Dary Ortega Ortíz, de la Sala Cuarta de Asuntos Penales para Adolescentes, adscrita al Tribunal Superior del Distrito Judicial de Neiva, que resuelve: “REVOCAR la sentencia impugnada y en su lugar, AMPARARel derecho a la educación inclusiva del menor J.D.B.N.” tal como se observa en el documento firmado el 30 de septiembre de 2022.

Sumado a lo anterior, Noreña aseveró que, producto de esto se realizó el cambio de la docente, reconociendo que el actual profesor de aula es más receptivo y está haciendo su mejor esfuerzo pese a no tener la formación correspondiente, con quien se llegó a un acuerdo en el que el menor acudiría dos horas a la institución, en un periodo progresivo transitorio inferior a tres meses mientras Juan Daniel se adaptaba y que, hasta el momento, no se ha cumplido con la contratación del docente de apoyo.  

La Secretaría de Educación

Frente a lo expuesto por la mamá del menor, Diario del Huila contactó a la secretaria de educación municipal, Martha Cecilia Losada de Fierro, quien afirmó que Juan Daniel Barona llegó a la Institución Educativa Misael Pastrana, sede La Rioja, trasladado de otra institución educativa de Neiva y que, desde la dependencia que lidera se continúa atendiendo el caso de manera puntual, dándole prioridad.

“Se realizó un Plan Individual de Ajuste Razonable, PIAR, para cada caso especial y acá me refiero a la discapacidad en todo su sentido, es decir, a cada niño que presenta alguna consideración. Este PIAR se programó para dos horas diarias dentro de la jornada que él estaría, decisión que se consideró tras conocer que el niño atiende formalmente las actividades académicas sin ninguna manifestación durante este tiempo, después de dos horas, el niño se activa de manera incontrolable, haciendo que se dificulte su participación en estas actividades”, dijo la secretaria de educación del municipio de Neiva, Cecilia Losada de Fierro.

Además, la funcionaria hizo referencia a que la madre de familia solicita el ajuste de atención a toda la jornada y que el juzgado efectivamente indica que se debe atender en la jornada sin especificar que se ha de contratar un profesional exclusivo para la formación del menor, sino para que el equipo que atiende el proceso de inclusión en las instituciones educativas, de forma itinerante que involucra al orientador escolar, al docente de aula y al coordinador, se programe para que el niño reciba la atención o esté en la institución.

“Se ha comprometido, hicimos una reunión con la orientadora escolar, docente de aula, docente de apoyo pedagógico itinerante y coordinador para revisar la situación. Se hace el análisis muy particular desde el entorno para incrementar la atención del niño dentro del centro o la sede, se le solicita a la señora madre que nos ayude con los profesionales de la salud que lo atienden para que nos garantice que el niño sí puede atender el PIAR que se establezca para toda la jornada, ya que específicamente el control del niño se dificulta después de dos horas y ese es el trabajo que seguimos adelantando, nosotros tenemos que ser muy cuidadosos porque sabemos que tenemos el deber fundamental de atender los casos y de solucionar los requerimientos, en primer lugar, en el entorno familiar de los cuidadores pero también debemos tener en cuenta las condiciones particulares y esto lo hacen profesionales especializados”, concluyó la funcionaria.